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Cursed

Autor: Darkgal 69

 

Capitulo 19

“Six feet deep is the incision

In my heart that barless prison

Discolours all with tunnel vision

Sunsetter...

Nymphetamine

Sick and weak from my condition

This lust, this vampiric addiction

To her alone in full submission

None better...”

Nymphetamine. Cradle of Filth

 

Lo habían logrado. Vegeta había alcanzado su más difícil meta. Había logrado convertirse en el Legendario. Pero no sólo él lo logro. Bulma también lo había hecho, aunque su transformación era un poco diferente a la suya.

Más que transformada parecía poseída. Durante los breves momentos en que Bulma duró transformado su ki había cambiado por completo; aparte de aumentar sorprendentemente no parecía pertenecer a ella. Era como si toda esencia de la Bulma que conocía desapareciese.

Se preocuparía por eso más tarde, cuando ella despierte.

 

No despierta aún. Ya han pasado 3 días y aún no ha salido del maldito tanque de regeneración.

 

En cinco meses nacería el heredero. Afortunadamente Bulma había soportado todos los castigos y la falta de alimento.

Lo primero que Vegeta ordenó al ingresar a Bulma al tanque era una radiografía general para saber si su hijo seguía con vida.

Dejó escapar un suspiro de alivio al escuchar las palabras del médico.

 

“No se preocupe Su Alteza, el heredero esta bien, vivo y sano”

“El Heredero? ¿O sea que es macho?”

“Si Alteza”

 

Un varón, una niña… que más da? Lo importante es que está vivo.

 

Vegeta se encontraba sumergido en sus pensamientos cuando es interrumpido por Kakarotto.

Vegeta: que quieres?

Kakarotto: disculpa Vegeta, pero es un asunto que debes atender de inmediato.

Vegeta: no me interesa, hasta que Bulma no salga de aquel endemoniado tanque no atenderé otro asunto.

Kakarotto: es importante. Desde que Frieza ha muerto el Imperio Cold ha quedado sin un líder… planetas enteros se encuentran en caos ya que no tienen a quien obedecer, las poblaciones se han revelado, no podemos permitir que esto siga así…

Vegeta: acaso eres retardado? No iré.

Rey Vegeta: hijo debes hacerlo.

Ambos guerreros voltean a ver al Rey quien había ingresado a la habitación sin ser notado.

Rey Vegeta: es tu deber como el nuevo Emperador, no los hagas esperar. Y no te preocupes por tu mujer, yo personalmente la cuidaré. No permitiré que ningún mal caiga sobre ella, no mi nieto.

 

Desde la victoria ante Frieza la actitud del Rey había cambiado por completo. Su hijo era más fuerte de lo que él pudiese imaginar, y no solo él, también su mujer. Ella había roto todos los esquemas. Primero; siendo Comandante General del Imperio más temido del universo, y después alcanzar un estado al cual se le negaba al género femenino saiyajin; ella era una súper saiyajin. Eso la hacía más que valiosa y merecedora del trono de Vegetasei. Aparte, ya estaba en camino la nueva generación.

Vegeta nunca se pudo imaginar a su padre hablar ni actuar de esa manera, pero lo entendía, era su manera de decir “Perdón por haber sido un idiota”

Sorprendentemente ante la intervención de su padre Vegeta accedió a salir de la zona de tanques y dirigirse a donde el caos reinaba. El arruinado planeta Frost.

 

Debí haberlo volado antes de salir de allí.

 

Vegeta se acerca al tanque en donde el cuerpo inconsciente de Bulma flotaba.

 

Vuelvo pronto.

 

Vegeta: andando insecto.

Kakarotto: como diga Príncipe.

 

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Una semana más tarde Vegeta termina sus asuntos en el Planeta Frost. Cambió la sede del imperio. Ahora era el Planeta Vegetasei.

Se proclamó el nuevo emperador y a Bulma la nueva Emperatriz. Llevaba restos del mutilado cuerpo de Frieza en las manos para convencer a los incrédulos.

De inmediato todos se arrodillaban en señal de sumisión.

Estaba complacido ante este acto. Estaba feliz, pero no del todo, no podía compartir estos momentos con Bulma ya que aún no había despertado.

 

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Una nave desconocida surcaba el espacio a la velocidad de la luz. Aparentemente se dirigía al planeta Frost.

 

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Vegeta se encontraba en lo que solía ser el palacio de Frieza. En las mazmorras más específicamente, desasiéndose de los últimos soldados fieles a Frieza, entre ellos el soldado Dodoria.

Basura

Este era el último día que permanecería en aquella bola de barro. Mañana regresaría a ver si Bulma ya había despertado.

Sube al salón del trono. Despreocupado de cualquier cosa.

Ingresa a la sala. Levanta la mirada. En medio del salón se encontraba una figura de espaldas. No podía saber de quien se trataba ya que poseía una capa negra que cubría por completa su figura.

Vegeta: quien eres?

Silencio.

Vegeta: Realmente ansías tu muerte por eso que ingresas a esta sala en mi ausencia y sin mi consentimiento. A caso no sabes quien soy?

En ese instante la figura voltea y se quita la capa del rostro revelando su identidad.

Vegeta se congela en el lugar en donde estaba.

 

Azul.

 

Ella lo mira y le sonríe.

No pasa una milésima de segundo para que Vegeta reaccione y corra hacia ella tomándola en sus brazos.

Sin articular una sola palabra la besa con todo lo que tenía guardado para este momento que tanto ansiaba. En ese beso liberaba todas las ganas y deseo que se había guardado esos dos meses de su ausencia.

Ella le responde con la misma fuerza y pasión.

Realmente era un beso asfixiante, lleno de deseo y alivio.

Alivio de al fin volver a sentir sus labios fundirse.

Bulma rompe el beso lentamente. Lo mira a los ojos, a esos ojos negros que nunca dicen nada, pero a la vez lo dicen todo. Brillaban con una intensidad inusual.

Temiendo que este momento se esfumase, Vegeta la toma por las piernas poniéndolas alrededor de su cintura. Sin esperar más avanzan hacia la pared desesperados por que sus cuerpos se fundan una vez más. Era la única manera en que expresaban lo que lo que en palabras no podían.

Vegeta la presiona fuertemente contra la pared y la besa en todas partes, con hambre, con gula. Deseaba estar en todas partes al mismo tiempo. Bulma gemía fuertemente. Ni siquiera hacía un intento por que sean menos audibles.

Con rapidez Vegeta la despojaba de la ropa que llevaba puesta.

Al mismo tiempo que Vegeta la desvestía ella dejaba a sus manos revelarse. Con suma urgencia y rudeza lo despojaba a él de su armadura y su camiseta necesitando sentir la piel expuesta de su amante contra la suya.

Vegeta: estamos impacientes?

Bulma sólo lo mira con malicia y se lame los labios ante la vista de su perfectamente esculpido pecho.

Lo restante de ropa en ambos fue descartado sin perder más tiempo. Los pantalones, las botas, capas, etc., todo ya se encontraba fuera.

Mientras que Vegeta trataba sus senos con la lengua mordisqueándolos y lamiéndolos ella besaba su cuello dejando un sendero de saliva en el proceso.

Vegeta sube a los labios haciendo leves roces, sin besarla haciendo que Bulma se desespere ante tal tortura. Entonces ella decide jugar el mismo juego. Toma la base de su cola y la estruja firmemente. Gemidos animalistícos escapan de la boca de Vegeta. Ella sonríe entre dientes.

Hasta ahí legó el auto control.

Desde que la besó ya se encontraba erecto.

Sin aguantarlo más la tomó fuertemente sosteniéndola por las nalgas y se sumergió en ella. Lenta y poderosamente.

Al sentirlo dentro Bulma instantáneamente dejó la cola y trasladó sus manos al cuello de Vegeta.

El mantenía su cabeza escondida en el hombro de su mujer, besándola en todos los sectores que alcanzaba, su oreja, la parte trasera de su cuello…

Él bombeaba sin parar, sintiendo cada vez más la necesidad de estar dentro de ella lo consumía como llama a una hoja seca.

Su nombre escapaba frenéticamente de la boca de ella. Cada vez más y más audible.

Eso lo alentaba a aumentar la velocidad. Bulma mantenía sus piernas selladas con fuerza alrededor de su esposo.

Las colas de ambos ahora se encontraban entrelazadas, como siempre lo hacían cada vez que hacían el amor.

Sintiendo que el orgasmo se acercaba Vegeta aumenta la velocidad y acerca sus colmillos a la suave piel expuesta del cuello.

La muerde desgarrando tejido y provocando que la sangre fluya en abundancia.

Bulma grita instantáneamente.

Sintió un inmenso dolor en el momento en que el incrustaba sus colmillos en su cuello, pero a la vez experimentaba el más intenso placer mezclado con un potente orgasmo.

Sus nombres se escuchaban sincronizadamente.

Él aun se encontraba dentro de ella bombeando en desperados intentos para que no se acabe el placer.

Sin dudarlo un instante Bulma clava sus colmillos en la piel del cuello de su amante, aproximándose a la misma zona en la cual ella había sido mordida.

Vegeta sonría para sí mismo. Había reaccionado siguiendo sus instintos.

Ahora ambos se encontraban unidos en cuerpo, alma y espíritu por el resto de sus vidas y por la eternidad. Era lo que ella deseaba. Era lo que él necesitaba.

Ella se aparta de su cuello para mirarlo. Aún tenía un poco de sangre en los labios.

La limpia con su lengua en un sensual movimiento. Vegeta se acerca a la herida que había hecho y empieza a lamerla.

 

Esto hace que ambos vuelvan a sentir la misma necesidad que tuvieron desde el momento en que se vieron. La necesidad de amarse el uno al otro en una entrega total de cuerpo y alma.

Bulma: otra vez?

Vegeta: y otra, y otra y otra…

 

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Ambos se encontraban exhaustos y rogando por aire. Ahora ambos se encontraban recostados, Vegeta contra la pared sosteniendo a Bulma del vientre.

Ella voltea y lo mira intensamente a los ojos y le acaricia la mejilla.

Al sentir el suave roza de su mano por su piel Vegeta ya no resiste. Al diablo con todo el orgullo, ya no lo podía aguantar, por más que esto en algún momento pueda ser utilizado en su contra, ya no le importaba, necesitaba decírselo.

Vegeta: perdóname, perdóname Bulma

Esconde su cabeza en la base del cuello de Bulma.

Ella sonríe para si misma.

Bulma: Vegeta, no necesitas de mi perdón, desde el momento en que te vi en este planeta estuviste perdonado.

Vegeta: Bulma, no sabes como te extrañé… Fui un idiota, nunca debí tratarte de esa manera… (La abraza con más fuerza)

Bulma: además Kakarotto me contó todos lo que planeabas hacer… estuviste a punto de sacrificar tu propia vida… como no perdonaría a alguien que moriría por mi? Y Vegeta; …………………EN QUE DIABLOS PENSABAS?!!

Vegeta: siempre tienes que arruinar todo verdad? Mujer escandalosa…(Le dice tapándose las orejas)

Bulma le toma el rostro con amabas manos y lo acerca al de ella.

Bulma: no quiero que nunca más lo hagas, y tampoco quiero que te vuelvas a poner en peligro de esa manera, yo no soportaría perderte a ti también.

 

Era cierto, la muerte del Doctor Briefs.

 

La tristeza se apoderó de su adorable rostro.

Vegeta: en cuanto volvamos a Vegetasei edificaremos un monumento en nombre de él, ya que fue una pieza clave en esta lucha contra Frieza. Será recordado como un guerrero de la realeza. Tendrá la ceremonia más despedida más impresionante que se haya visto en la historia de Vegetasei.

Bulma: gracias Vegeta.

Vegeta la abraza con ternura y luego coloca sus manos masajeándole el vientre.

Se callan por un instante.

Lo único audible en la habitación era el sonido de la respiración de ambos.

Con las manos quietas en el vientre de Bulma, Vegeta vuelve a hablar.

Vegeta: mujer..?

Bulma: mmm?

Vegeta: cuando piensas decírmelo?

Bulma: que cosa?

Vegeta: mujer… esto? Presiona suavemente sus manos contra el vientre de Bulma.

Bulma: pero cuando? Como?

Vegeta: ya te he dicho que nada se le escapa al poderoso Príncipe Vegeta

Bulma: fue Kakarotto, no?

Vegeta mueve su cabeza afirmando

Bulma: insecto entrometido….

Vegeta: en cinco meses no puedes realizar acción alguna; mucho menos luchar, no quiero que le suceda nada a nuestro hijo.

 

Nuestro hijo.

 

Bulma: resistí golpizas de Frieza, no te parece que podré soportar un entr----

Vegeta silencia con una beso.

Vegeta: El príncipe debe nacer fuerte como su padre…

Bulma: Príncipe? Como sabes que es varón?

Vegeta: ya te he dicho que nada se le escapa al poderoso Príncipe Vegeta. Sólo no lo hagas, cinco meses, nada más.

Sabiendo que con discutir no llegaría a nada se rinde.

Bulma: bien, como diga Su Bastardidad…

 

 

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Fin

Notas del autor: gracias por leer esta “cosa” que fue mi historia, espero que la hayan disfrutado leyéndola tanto como yo disfruté haciéndola. Trate de hacerla lo más parecida posible a una historia de amor y entrega, mostrando como el amor que sentían dos personas fue capaz de superar todas las barreras impuestas por ellos mismos y por los demás. Ese fue el motivo por el cual escogía Bulma y Vegeta como personajes principales. A mi criterio son los que más amor y entrega tuvieron y los más indicados para formar esta historia.

Esta dedicada para todos aquellos que aún en estos tiempos piensan que el amor lo puede todo.

Antes de comenzar cada capítulo probablemente les habrá llamado la atención que cada uno empezaba con la estrofa de alguna canción.

Cada una de esas canciones sirvió como fuente de inspiración y cada una de ellas fue necesaria para terminar este fic.

Cada una posee el nombre de la canción y del artista.

Háganse un favor, si tienen ganas búsquenlas y escúchenlas.