InuYasha Fan Fiction ❯ Un principe enamorado ❯ De demonios y mujeres ( Chapter 23 )

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…Zetus se acerca tímidamente las amenazas contra su vida se acumulan y…ahem! Este capitulo todavía no es lemon…suspira abatida porque comprende que probablemente sus lectores decidan mandarla al mismo infierno a hacerle compañía a Sokoe, pero es que tengo que hacer que el youkai cabezota la conquiste…no se desesperen porfa ^^' Zetus junta sus manitas como suplicando con ojitos de autora asustada.

………..

Capítulo 23

De demonios y mujeres humanas…

Parte 1: Conquistar es trabajo de hombres!!

……

Cuando Sukime entró al cuarto vio a Sesshoumaru sentado de espaldas a la pared como descansando.

"Buenos días Amo, voy a cambiarle las vendas"

"…"

Sesshoumaru hizo caso omiso de la insistencia y desconcierto de la youkai al ver que no se movía de su lugar. Con cuidado Sukime descubrió la herida dejando el pecho desnudo al descubierto. Sesshoumaru permaneció inmóvil, observaba a Rin con los ojos entrecerrados, acechándola como a una presa.

La piel alrededor de la herida era de color púrpura con toques de amarillo por lo golpeado y maltratado que estaba. En contraste con aquel arco iris de dolor la piel que cubría sus senos y el resto de su torso se veía cremosa, impecable y tentadoramente acariciable. Era una mezcla de belleza y dolor insinuante y provocadora que despertaba los instintos más salvajes y animales que Sesshoumaru tenía.

Cuando Sukime terminó miró rápidamente a su Amo, tenía los ojos cerrados, recogió las vendas sucias y recibió los alimentos que Moru traía. Era un recipiente pequeño con una pasta suave de color blanco. Tan pronto la youkai tomó el plato Moru se arrodilló a la cabeza de Rin dispuesto a levantarla para que Sukime la alimentara.

Estaba a punto de deslizar los brazos bajo el cuerpo de su amiga cuando un gruñido grave y violento lo detuvo en seco, era Sesshoumaru. Moru dudó en segundo para luego calmar su instinto de responder a la amenaza; como youkai que era sabía que ese gruñido era una advertencia, una reacción normal de un macho protegiendo a su hembra de manos ajenas.

Se retiró lentamente, no iba a detener a un demonio que defiende a su pareja mucho menos cuando se trataba de su Amo. Sukime los observaba casi sin respirar y después reparó en la expresión de Moru que sonreía disimuladamente aprovechando que el príncipe no lo miraba a él sino a Rin.

Sesshoumaru continuó dos segundos más sin hablar para después moverse hasta estar frente a Moru gruñendo entre dientes.

"Yo lo haré!"

"…"

"Entendiste?"

"S-si claro Amo, la princesa está a su cargo, solo Sukime-sama la puede tocar, yo traeré agua, vendas y la comida para luego desaparecer de su vista…"

"Grrr! Y bien que rayos estás esperando?"

"Ah si claro Amo ya me esfumé!"

El príncipe lo siguió con la mirada y una vez que salió se concentró en Rin. Con delicadeza la sentó en su regazo, asegurándose que su brazo soportara todo el peso de su pequeña, le acomodó los cabellos fuera del rostro y miró a Sukime que no había dejado de verlo con la boca abierta y sosteniendo el plato con ambas manos.

"Que?"

"N-nada Amo…no lo va a matar o si?"

"…no!"

Aliviada y sonriente la youkai tomó un poco de la pasta con los dedos y la puso en la boca de Rin que con ternura Sesshoumaru sostenía abierta. Con cuidado el príncipe masajeó su cuello para que la comida bajara y luego le dio a probar agua inclinando su cabeza un poco para que no se derramara en sus labios.

"Amo pero ella está inconsciente!"

"Y? Igual tiene que comer para que cuando despierte tenga fuerzas!"

"Podrá quedarse con nosotros para siempre?"

"Esa es la idea!"

Al ver que la mujer enmudecía y se le aguaban los ojos, Sesshoumaru torció los ojos exasperado.

"Ahora que sucede Anciana?"

"Es que…la primera vez que la vi era tan pequeña, toda descuidada, golpeada y sin decir nada y ahora…"

La voz de la youkai se quebró por la emoción incomodando más a Sesshoumaru que no se atrevió a decir nada e instintivamente abrazó a Rin como si se la fueran a quitar. Respirando hondo para calmarse Sukime recobró la compostura.

"Disculpe Amo soy solo una vieja sentimental…todavía recuerdo las primeras palabras de la pequeña, obviamente la primera ni se la tengo que decir…"

Al notar que el demonio la miraba intrigado la youkai soltó una risita cubriéndose la boca.

"La primera palabra que ella dijo fue su nombre Amo…acaso no lo sabía?"

"…"

Sintiéndose felizmente incómodo Sesshoumaru escuchó pacientemente a la youkai mientras le contaba relatos de Rin siendo niña, una cosa en particular despertó su curiosidad.

"Cómo es eso que ella se llamaba a sí misma princesa?"

"Es que al escucharnos a nosotros dijo que entonces ella era su princesa porque se quedaría con usted para siempre…"

El youkai se sintió invadido por una sensación cálida. Cerró los ojos y se imaginó a sí mismo despertando junto a Rin todas las mañanas de su vida, sin darse cuenta sonrió suavemente ante la mirada atónita de Sukime que no podía creer lo que estaba presenciando.

Pasaron dos días más sin que Folken regresara, alargando el placer del príncipe por cuidar a Rin. Finalmente el mayordomo regresó al quinto día. Cuando el youkai iba en camino al cuarto de Rin, Moru prácticamente lo derribó al verlo.

"Que te sucede muchacho, pasó algo con Rin?"

"Si…bueno no!"

"Explícate!"

"Es que el Amo está…no me deja acercarme a Rin!"

"Cómo dices?"

"Folken-sama él se comporta como un macho…yo iba a ayudar a Sukime y casi me arranca la cabeza…"

"Aahh! Ya veo se comporta como un perro rabioso y posesivo?"

"Ajá…eso era lo que tu querías verdad?"

"Si Moru precisamente, como está ella?"

"Bien creo, aunque aún no despierta!"

"No importa, mañana irás a la aldea del Amo Inuyasha y esperarás allá hasta que ellos decidan regresar. Ayúdalos en todo lo que puedas…disfruta tu tiempo con ellos, es una aldea muy agradable!"

"En serio?? Gracias Folken-sama!"

"De nada muchacho ahora iré a verla!"

"Ten cuidado!"

"Ja ja ja yo soy sólo un viejo…!"

Folken siguió caminando sintiéndose liviano por las noticias del muchacho. Al abrir la puerta el viejo mayordomo se asombró con la escena frente a sus ojos. Sesshoumaru acurrucaba a Rin contra su pecho como si fuera un bebé, se podía percibir el aura del príncipe en total tranquilidad y protegiendo a Rin; que se veía hermosa y con un incipiente tono rosado cubriendo sus mejillas. Su recibimiento fue un rugido.

"Tardaste cinco días Anciano PORQUE???"

"No encontré las hierbas hasta ayer Príncipe!"

"Y bien que haces ahí parado?"

"Las preparé enseguida…Amo y ella…?"

"Está bien que no la ves??"

Jaken se enderezó para intervenir a favor de su Amo bonito

"Folken-sama el Amo bonito ha cuidado a la chiquilla muy bien, le da de comer, le da agua, le habla al oído…"

"BASTA YA JAKEN!!"

Riendo entre dientes Folken y Jaken intercambiaron una mirada cómplice.

"Que bueno, siguió las instrucciones al pie de la letra me doy cuenta…!"

"…"

El mayordomo no dijo nada más, estaba absorto viendo a Sesshoumaru que acariciaba el rostro de Rin con tanta ternura que parecía un espejismo. El príncipe deslizaba sus garras dibujando las facciones de su protegida mientras quitaba mechones de cabello pasándolos detrás de la pequeña y suave oreja de Rin.

Aquel despliegue de devoción era más de lo que el youkai hubiera imaginado y se dio cuenta que al amar a Rin Sesshoumaru revelaba una faceta de su personalidad totalmente desconocida para todos, inclusive para el mismo príncipe. Su amor sería tan fuerte como sus poderes y amaría a Rin con toda la pasión y fervor de un youkai que nunca había conocido el amor aún cuando siempre lo había tenido junto a él.

Una vez que preparó las hierbas las dejó en un recipiente y salió acompañado por Jaken, que no más se alejaron de la habitación le contó con exaltación que su Amo no se separaba de Rin ni un instante.

"Jaken parece un milagro!"

"Si lo sé…el Amo está diferente y muy agresivo!"

Al escucharlo Folken supuso que inocentemente el pobre renacuajo había tratado de acercarse a Rin.

"JA JA JA Por casualidad trataste de tocarla?"

"…No te burles…si no hubiera sido por mi báculo seguramente me parte en dos…"

"No la puedes tocar hasta que ella despierte…te quedó claro?"

"Demasiado!!"

………..

Pasaron cinco días más de cuidados y besos en el cuello que nadie veía, en el día cuando Sesshoumaru salía para estirar las piernas le dejaba al cuidado de Sukime pero durante la noche la acunaba entre sus brazos aferrándose a ella como si su vida dependiera de eso.

Con el pasar de los días los recuerdos del príncipe fueron aclarándose, lo suficiente como para saber lo fácil que había sido para Sokoe dominarlo.

En silencio se levantó para salir de la habitación.

"Jaken quédate aquí debo hablar con Folken..."

"Hai!"

Sesshoumaru caminó hasta unos árboles que había a un costado del castillo y esperó por Folken con los ojos cerrados.

"Amo usted quería verme?"

"Si, porque no me di cuenta antes de lo que tramaba Sokoe?"

"Estaba tan triste que se descuidó, Sokoe supo aprovechar eso!"

"mm! Pero porque el odio hacia Rin?"

"Fácil, sus poderes mentales le permitieron ver todos los recuerdos de la vida que ustedes dos han tenido juntos!"

Sesshoumaru parpadeó al escuchar la explicación de su sirviente y evocó la noche del río.

"Entonces estaba celosa?"

"No sólo eso, usted no fue capaz de ocultar lo que siente por ella!"

"..ah si? Anciano eres un indiscreto…tu sabías que esa mujer no era para mí?"

"Obvio!"

"Y?? …porque demonios no dijiste nada… RESPONDE!!"

Sesshoumaru no trataba de esconder su frustración mientras que Folken meditaba su respuesta.

"Pero que muchacho más insolente si yo hubiera dicho algo me hubiera escuchado? Estaba cegado por los encantos de esa mujer y su obsesión con sangre pura…!"

"…ggrrr!...supongo que tienes razón Sokoe era muy hermosa!"

"Por supuesto que tengo razón pero…mi niña es mas hermosa y siempre lo ha amado; además las mujeres humanas son muy apasionadas!"

Sesshoumaru se sorprendió al escuchar a Folken hablar con tanta propiedad de las mujeres humanas, tanto que no pudo aguantar su curiosidad, era extraño ceder a tantos impulsos pero estaba bien porque sentía que era hora de cambiar.

"Que dices?? Y tu como sabes eso de las mujeres?"

"Eso es problema mío jovencito!"

"Vaya entonces has estado con mujeres humanas…!"

"Tal vez, pero al menos yo me doy cuenta de lo que tengo bajo mis narices…youkai testarudo y ciego!"

"Insolente ya te dije que me estaba cansando de tus ironías…no te arranco la cabeza por sé que ella te quiere…Ahem!...Ella ya no es ninguna niña verdad?"

"No Muchacho…tendrán cachorros hermosos y fuertes!"

Al youkai se le iluminó el rostro con la idea, ahora más que nunca deseaba que Rin despertara y por el aroma que percibía en el aire sabía que su rutina diaria estaba a punto de cambiar drásticamente.

"Iré a ver a la princesa tu debes recibir a tu pequeña y a los demás!"

"Amo?"

"Ya no tardan en llegar Folken-jiji!"

Folken no le dijo nada, caminaba apresurado al patio principal para recibir a los visitantes, feliz de volver a ver a Kali.

…………..

Sesshoumaru estaba arrodillado frente a Rin y de espaldas a la puerta. No se movió al percibir como abrían la puerta y unas pisadas ligeras se acercaban deteniéndose a escasos pasos de él. Reconoció el aroma del su sobrino pero esperó a que el pequeño hablara.

"Hola…quiero verla por favor!"

"Eres fuerte?"

"Hai, Okasan dice que tiene unas heridas muy feas pero no me importa tengo que verla!"

"Claro!"

Sesshoumaru esperó a que el hanyou estuviera frente a él para abrir los ojos, al hacerlo suspiró viendo a Van recostado en el pecho de Rin con una amplia sonrisa.

Arrodillándose junto a Rin, el niño miró a su tío a los ojos con expresión seria.

"Tío Sesshoumaru porque la atacaste si ella vino a salvarte…te extrañaba mucho y siempre lloraba por ti en las noches…"

Sesshoumaru no supo que contestar tratando de imaginar a Rin llorando todas las noches por su culpa. Se acomodó en su lugar, cerró las manos en un puño sobre su regazo y movió los labios para responderle a su sobrino.

"Estaba envenenado Van!"

"Y ya no verdad?"

"No"

"No la vas a tratar mal?"

"Nunca más!"

"Me lo prometes?"

"Sí!"

Sin pensarlo dos veces el amoroso niño se subió al regazo del príncipe para abrazarlo. Sesshoumaru le devolvió el abrazo recordando la infancia de Rin. De alguna forma su sobrino se parecía a ella y eso lo hacía vulnerable ante el pequeño hanyou.

"Te pareces a ella!"

"En serio, porque?"

"Ella siempre me abrazaba cuando era niña...!"

"Y quieres te abrace ahora…?"

"Algo parecido enano!"

"Moru nos contó que la cuidaste mucho!"

"Era lo menos que podía hacer!"

"Tío crees que yo pueda dormir con ella hoy?"

Sesshoumaru se atragantó, si Van dormía con ella eso significaba que él no podría hacerlo pero al contemplar la mirada emocionada de su sobrino, renunció a aquel placer y le dijo que si.

"Ay gracias…pero tú donde estarás?"

"Cerca"

En ese momento los distrajo la presencia de alguien en la puerta.

"La lastimaste!!"

"No fue intencional Keiko!"

"Ya lo sé, mi mamá me lo dijo, pero pudiste haberla matado…!"

Apartándose de Sesshoumaru, Van reaccionó enfurecido por la agresividad de su hermana mayor.

"Ya cállate, estaba envenenado y escuchaste a Moru, él la cuidó!"

"Si claro pero…"

Con la sola mención del joven youkai la jovencita sintió que se ponía roja hasta las orejas, con una mirada maliciosa y divertida Van no dudó en mortificar a su hermana.

"Ahem! Escuchaste a Moru con mucha atención Keiko-san…además…le llevaste sus alimentos todos los días que estuvo con nosotros, yo creo que te gusta…"

Incapaz de esconder la emoción que le provocaba pensar en Moru Keiko estalló en cólera en contra de su hermano que anticipó el ataque y se refugió detrás de su tío.

A Sesshoumaru le pareció divertido ver el intercambio entre hermanos pero les pidió que se calmaran sujetando a Van por el hombro. Afuera en el pasillo se escucharon pasos que se acercaban corriendo y después la puerta se abrió de un solo golpe. Kali estaba en el umbral con la respiración entrecortada.

"Rin…Rin-sama?" Kali se arrodilló junto a la joven mujer tomando una de las manos entre las suyas. En comenzó a hablar como si no hubiera un mañana.

"Todavía no despiertas y yo que quería decirte que ya conocí tu aldea, Otosan dice que pronto estarás bien y vas a ser la princesa y vas a tener bebés con el Amo y así yo podré cuidarlos y entonces voy a ser como la hermana mayor bueno aunque ya tengo a Keiko nos hicimos muy amigas y soy amiga de Van y Shippou, que me dijo que era bonita como tu me dices Shippou es muy fuerte y poderoso y es youkai y…Rin tienes que despertar rápido y…"

"Kali!"

La pequeña dejó de hablar como si la hubieran silenciado con un golpe y volteé su cabeza hacia Sesshoumaru tímidamente.

"Si Amo?"

"Porque no esperas a que ella despierte, estoy seguro que querrá que le cuentes todo eso!"

"Si Amo lo que usted diga!"

Sesshoumaru se levantó repitiendo en su cabeza las palabras `tener bebés con el amo' y una sonrisa escondida entre sus labios. Al salir de la habitación se topó con que su hermano le cerraba el paso viéndolo de forma extraña.

"Es cierto que la cuidaste?"

"Hai!"

"Recordaste todo?"

"Hasta el último detalle!"

"Seguirás con tu estúpida obsesión?"

"No!"

"Y ella?"

"Está dormida!"

"Maldita sea sabes muy bien a lo que me refiero!"

"…"

"Y que piensas hacer?"

"Hacer? Lo que sea necesario!"

"…bien parece que te funciona esa cabezota dura!"

Inuyasha siguió hasta la habitación. Sesshoumaru no se dio cuenta que Kagome estaba frente a él con una sonrisa.

"Hola, en serio harás lo que sea necesario?"

"Por supuesto!"

"Ahhh! Genial!"

"…"

Algo en la voz de Kagome le hizo reflexionar pensando que probablemente había algo que estaba pasando por alto, pero no le dio importancia; sea lo que fuere estaba dispuesto a todo con tal de que Rin fuera feliz.

Pasaron dos días mas y Rin dormía rodeada por Van y Kali, querían según ellos estar ahí para cuando su amiga abriera los ojos. El príncipe por su parte se sentía impaciente, quería que Rin despertara para demostrarle todos los sentimientos que habían encontrado para ella.

Su panorama de felicidad y amor se vio empañado cuando por accidente, escuchó una conversación infantil que lo puso a pensar.

Los tres se encontraban sentados bajo un árbol sin advertir su presencia. Sesshoumaru sonrió al escuchar que como siempre, su sobrino lo defendía a capa y espada de su agresiva hermana.

"Deja de decir que es un tonto!"

"ES un tonto!"

"Pues yo creo que hacen bonita pareja además Rin quiere tener bebés con el amo!"

Keiko resopló porque sabía que su amiga amaba a Sesshoumaru con todas sus fuerzas pero hablaba mal de su tío, solo para hacer rabiar a su hermano menor.

"Sango dice que Rin debe reclamarle por dejarla por otra mujer"

"Si hermanita porque yo escuché a papá y mamá decir que mi tío tenía que prepararse, porque cuando Rin despierte no va a querer dormir con él y hacer cosas para tener bebés y ser esposos, a menos que él se porte bien!"

"Es cierto mi papá me explicó que para ser esposos tienes que quitarte la ropa y darte besos!"

Los tres se volvieron a ver y soltaron la risa con la inocencia de no comprender muy bien lo que eso significaba en realidad. Sesshoumaru mismo tuvo deseos de reír al imaginarse besándose con Rin desnuda entre sus brazos. Apartando esa excitante imagen volvió su atención a los niños.

"HA! Sango y Mamá dijeron que definitivamente Sesshoumaru tiene que conquistar a Rin!"

"Hai, yo también escuché eso, conquistar es trabajo de hombres…"

Sesshoumaru contenía la respiración comprendiendo que estaba en problemas y reemplazando la imagen de besos y piel desnuda con una de una sonora cachetada y rechazo definitivo.

Suspiró y esperó la respuesta de Van, que ahora parecía disfrutar de la atención que su hermana y nueva amiga le daban. Las niñas le pedían a dos voces que les contara que significaba `conquistar'. El hanyou se acomodó y con una actitud confiada y arrogante, que reafirmaba quien era su padre, Van se dispuso a dar su explicación.

"Miroku-sama me explicó, conquistar significa hacer cosas lindas para la mujer que te gusta!"

"Cosas lindas como que?"

"Abrazarla, besarla y decirle que es bonita…aah y nunca compararla con otra mujer…mmm! Miroku me hubiera explicado más, pero Shippou lo interrumpió diciendo que yo era muy joven para entender!"

"Ahhh! Entonces no debe ser muy difícil!"

"Eso creo que Shippou también dijo que a las mujeres humanas hay que tratarlas con cuidado porque cuando se casan con youkais no quieren hacerlo todos los días!"

Las dos niñas hablaron al unísono y Sesshoumaru apretó la mandíbula.

"Hacerlo? Hacer que?"

"…yo no entendí esa parte…aunque debe ser algo muy divertido, porque Shippou y Miroku se pusieron a reír y la cara se les puso roja!"

"Ahh! Estoy segura que Rin va a perdonar al amo cuando la conquiste!"

Los tres asintieron con las palabras de Kali y fue cuando escucharon que Sukime los llamaba para cenar. Los tres se fueron dejando al oyente secreto con un sin fin de preguntas y con la confianza en sí mismo hecha pedazos.

(Conquistarla??...no había pensado en eso, no tengo idea de cómo será ella enojada conmigo…mmm! Porque no habría de estarlo? Primero la aparto de mi lado por culpa de una loba y después casi la mato…Soy un maldito genio!!)

Caminó hasta la habitación de Rin admirando su castillo a la luz del atardecer, se quedó sentado en el pasillo disfrutando de ver como el día iba muriendo mientras el cielo se teñía de estrellas.

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