F3: Frantic, Frustrated, And Female Fan Fiction ❯ Hentai School ❯ Venganza ( Chapter 11 )

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Hentai School
 
Venganza
 
La venganza es como el helado, sabe mejor cuando esta frió, o así dice la gente, el cobrar venganza suele ser muy placentero, hacer pagar a un infeliz que te engaño y estafo es algo sumamente satisfactorio, pero también depende de las circunstancias y el tipo de revancha que se va a efectuar.
 
Los dos jóvenes yacían en el suelo del cuarto, trataban de ponerse de pie pero les era inútil, sus fuerzas habían sido gastadas por completo, no tenían ropa alguna encima, sus cuerpos estaban empapados en sudor y líquido femenino de placer, casi no podían pronunciar una palabra, también estaba una chica cerca de donde ellos estaban, poniéndose su uniforme de nuevo mientras una gran sonrisa adorna su rostro, pero luego es borrada con rostro de decepción.
 
-Y se dicen llamar hombres…. ni siquiera cumplen sus promesas -dijo ella con un tono de desagrado.
 
-Pero……. Es imposible…… complacerte……. -dijo el joven casi sin aliento.
 
-¡¡ESE NO ES EL PUNTO!!, ¡ustedes me prometieron que no me dejarían en paz hasta hacerme ver estrellas, hasta llenar mi mente con puro placer!, pero al parecer son unos debiluchos que no pueden soportar un poco de placer de una mujer de verdad.
 
-Es…. Imposible…… gastamos todas……. Nuestras fuerzas…… y no pudimos…… Ahg…
 
Ambos chicos cayeron inconscientes debido a que gastaron todas sus energías en hablar con la chica en cuestión.
 
-Si aun me escuchan…… díganle a Yokoshima que será el próximo, adiós Musaki y Miyohin….
 
Las victimas……. Tenchi y Yahiko…… la culpable……. Minako……. Debido a que hace un par de días Tadao y los chicos decidieron divertirse con ella, no se habían percatado de que tan fogosa era realmente, y haciendo una promesa de no dejarla en paz hasta satisfacerla, ella deseaba que cumplieran con su promesa, pero ellos se acobardaron en el ultimo momento debido a la inesperada respuesta de la insaciable chica y se fueron cobardemente, ahora ella desea vengarse de ellos, haciendo que cumplan su promesa, de una manera u otra, y sabiendo que ella no fácil de complacer, dejo completamente débiles a los chicos, mas de lo que ellos podían soportar.
 
A la mañana siguiente, todo transcurría normalmente, todos entraron a clases y esperaron a que llegase alguno de los profesores, Tadao aun no lograba recuperarse del todo de sus heridas, al fin de al cabo fue un daño sumamente grave, pero ya habían pasado varios días desde el incidente de las fotos, que por cierto lograron conseguir mas dinero del esperado.
 
-(Je….. valió la pena la golpiza) -pensó mientras una sonrisa se formaba en su rostro.
 
La Srta. Misuki fue la maestra que los atendió, luego de las formalidades de la mañana, pasó a leer los anuncios del día.
 
Entre los anuncios, menciono que Tadao se quedaría después de clases limpiando el salón, lo cual no fue muy de su agrado pero supo que ya no seria una completa tortura ya que Asuka era mas considerada con el, otro que captó su atención fue que Yahiko y Tenchi se reportaron como enfermos y se ausentarían por un par de días.
 
-(¿Enfermos?….. ¿Los dos?..... Esto si me parece muy raro, si ayer estaban como si nada)
 
Luego de las clases, llegó el receso, Tadao se encontraba aun meditando el porque de la ausencia de sus amigos.
 
-(Quizás los atraparon con lo de las fotos y quizás los golpearon, o quizás los expulsaron por unos días…… Ahg no lo se……… aun así me parece muy raro que se hayan ido).
 
Pero sus pensamientos fueron desvanecidos cuando escucho una voz detrás de el.
 
-¿Extrañando a tus amigos Yokoshima?
 
El, extrañado, volteó a ver de quien se trataba, para su sorpresa era Minako.
 
-Oh…… Minako…….
 
-Al parecer no pensé que te preocuparas por esos dos cobardes, mas aun que los consideres tus amigos.
 
-Bueno quizás no sean muy listo pero son muy ingeniosos, ¿Por qué me dices eso?
 
-¿Recuerdas, nuestra pequeña fiesta Yokoshima, la que sostuvimos en el gimnasio?
 
El joven iluso la había olvidado por completo, pero cuando se le recordó, rápidas imágenes del suceso pasaron en frente de sus ojos, haciendo que el se pusiera algo nervioso.
 
-¿Y bien? -dijo ella mientras se acercaba un poco a el
 
-Em, buen, este, yo, bien, em……. Si…. Lo lo lo recuerdo.
 
-¿Recuerdas lo que me dijiste?, ¿recuerdas la promesa que ustedes me hicieron?
 
Cuando escucho eso, sentía como todo esto le daba un mal presentimiento, y claro recordó cada palabra que se le fue dicha a la chica en ese momento.
 
-Em…. Si -dijo mientras retrocedía al avance de Minako con un semblante de casi miedo.
 
-Bueno -dijo mientras aun continuaba avanzando- trate de que tus amigos cumpliesen con ella, pero al parecer…… no son lo suficientemente hombres como par cumplir sus promesas.
 
-¡¿Quieres decir que!?… Oh no……….
 
-Oh si, al parecer, no poseen mucha……… resistencia….
 
Era claro, ella era responsable de su ausencia, lo cual hizo que le pusiera la piel de gallina.
 
-¿y, y, y, y, y, y, y, que vas a, a, a, a, a, a, a hacer?
 
-Hacer de que tu la cumplas, al fin de al cabo, no puedes huir de tus obligaciones.
 
En ese momento sonó la campana anunciando el fin del receso.
 
-Te veré luego Yokoshima, y por favor, no trates de escapar, si no deseas más golpes de los que ya tienes.
 
El muchacho simplemente observo como ella se alejaba en dirección de las aulas, y claro el, no se encontraba muy feliz que digamos, bueno claro ella era todo un bombón, pero su terrible sed de lujuria, hacia temblar a cualquiera, incluso a el, aun después de haber decidido que nunca jamás las mujeres lo controlarían, pero esto era diferente.
 
El día transcurrió muy lentamente, al menos para la noción del tiempo de los estudiantes, y Tadao se encontraba sumamente preocupado por su actual situación, cada vez que volteaba a ver a la chica de cabello rubio, ella no le quitaba su mirada de encima, lo cual lo ponía mas nervioso, sudaba a raudales, su cuerpo temblaba con cierta emoción/miedo, pero prevalecía mas el miedo.
 
Si ella pudo hacer que esos dos no llegaran hoy a la escuela, quiere decir que si los dejó sumamente exhaustos, casi…. te atrevió a pensar…… cerca de morir.
 
-(Morir de placer….. ¿Será doloroso o agradable?)
 
Sacudió su cabeza de esos raros pensamientos y trató de pensar en algún plan de escape, pero fueron frustrados por completo al saber que la Srta. Misuki supervisaría la limpieza personalmente, lo cual hacia imposible su escape, huir no era una opción.
 
Llegó la tarde, el sol matizaba con un agradable tono naranja, los pupitres eran movidos mientras limpiaban y barrían todo el salón, durante ese transcurso de la limpieza pensó que tal vez podría escapar cuando terminase, pero el se asusto mas al ver la silueta de Minako a través de la ventana del pasillo, en otras palabras, cuando el saliera no habría manera de huir, las ventanas que daban hacia el patio tampoco eran opción, estaban en el segundo piso y no podrían ser abiertas.
 
Así que todo se redujo a esto: lo iba a hacer de una manera u otra.
 
Todos habían terminado con su labor, tomaron sus mochilas y salieron del salón, quedando Tadao solo en el, mientras observaba con temor como cada uno de ellos se marchaba, y la silueta de Minako aun permanecía en la entrada del salón.
 
Se quedó inmóvil, casi paralizado, y su tensión subió aun mas al ver que ella entraba al salón.
 
-¿Pensabas en escapar? -le dijo desde la entrada del salón.
 
-Sería una mentira si dijera que no -respondió con gran resignación.
 
-Vamos no pongas esa cara, míralo del lado positivo, tendrás un poco de tiempo de calidad con un linda chica.
 
-Lo malo es que quizás pierda la vida.
 
-(sonríe) Vamos no exageres, pero si quizás pases mucho tiempo en cama.
 
Ella lo sabia, lo sabia por su mirada, tenia miedo, dudaba de el mismo, lo cual significaba que el seria igual que los demás, parte de ella deseaba que el cumpliese su palabra, pero su rabia interior quería verlo sin aire ni fuerzas, sufriendo con todo el placer que deseaba darle, agonizando de ser posible.
 
-Será mejor que nos vayamos, no tengo deseos de resolver esto aquí.
 
Le hizo una señal con sus dedos de que la siguiera mientras salía del aula, claro que huir en ese momento era imposible.
 
Resignándose a su destino, siguió a la chica de manera lenta, y dolorosa, si saben a lo que me refiero, como cuando un asesino va a ser ejecutado en la silla eléctrica, ya casi sentía los grilletes en sus muñecas, pero trato de caminar a su lado todo el tiempo, simplemente la miraba de reojo, mientras ella siempre mantenía una gran sonrisa en su rostro.
 
-Y…. ¿a donde te diriges?
 
-A un lugar en especial donde podamos estar solos.
 
Incluso el debió de suponerlo, pero no fue así, se sorprendió cuando vio el lugar de ejecución… em digo que ella eligió: El gimnasio, donde todo comenzó.
 
-Entra -dijo ella me manera tosca y molesta.
 
El obedeció y comenzó a caminar hacia la eterna oscuridad que siempre habitaba ese lugar, solo pudiendo escuchar su propia respiración agitada.
 
Se quedo inmóvil por unos momentos, y el silencio se apodero del lugar.
 
-(Tanta….. oscuridad)
 
Luego sintió que unos brazos que salían de las sombras lo rodeaban rápidamente, al igual que unos labios besaban los suyos, un poco de luz entro al lugar para revelar a Minako enfrente de el.
 
-Ahora pagaras por atacar a una chica inocente y corromperla por completo, con lo que tanto añorabas hacer, ahora eso te hará sufrir.
 
-Em… quizás no sirva de nada ahora pero ¿estaría bien si me disculpo?
 
-Tonto, lo que hiciste no tiene perdón, y ahora pagaras con la dulce tortura que yo te daré.
 
Seamos honestos, cualquier chico mataría (literalmente) por una oportunidad como esta, una chica deseosa de hacer el amor, ardiente, apasionada, Wow quien no lo desearía, pero el saber que es insaciable, que su lujuria no tenia fin, que podría extinguir todas tus fuerzas durante el proceso, hacia quizás de esto una agradable pesadilla.
 
Tadao tenia un poco de miedo, al igual que estaba muy excitado por las sensuales amenazas de Minako, resignado a su destino raramente malo, decidió tomar la iniciativa al abrazarla con pasión y regresarle el beso.
 
-Si voy a pagar por lo que te hice, entonces haré lo posible por disfrutar de la tortura.
 
-Disfrútala mientras puedas tonto, luego de unos momentos veremos si ese tono de decisión sigue en pie.
 
Y en un frenético movimiento de ambos, comenzaron a besarse, acariciarse, quitarse sus ropas y caer estrepitosamente al suelo.
 
Nada de romance ni seducción, ambos decidieron ir al grano, luego de despojarse de sus ropas el la penetro rápida y abruptamente, mientras mordisqueaba sus senos y callaba sus gemidos con sus besos, sus movimientos eran rápidos, su miembro se deslizaba fácilmente ya que estaba completamente húmeda, sus piernas se aferraron a su cintura dándole señal que deseaba que el permaneciera dentro de ella, sus ojos permanecían fijos en los de el al igual que el lo hacia, a decir verdad ambos se miraban de manera lujuriosa, deseándose mutuamente, salvajemente, el sentimiento de placer que se proporcionaban era delicioso y sumamente deleitable.
 
Ninguna palabra fue dicha, pero con su mirada decían millones de cosas: “que esperas hazme tuya”, “¿Eso es todo lo que tienes?”, “No te atrevas a detenerte”, entre otras cosas, se colocaban en diferente posiciones, ella recostada con una de sus piernas en el aire, ella montado encima de el, el clásico 69, el sentado detrás de ella mientras ella saltaba ferozmente, contraminada a la pared de espaldas, un 69 vertical, etc., etc., etc.
 
Y claro no podían faltar los dulces clímax de placer u orgasmos de toda esta lujuria desenfrenada de ellos dos, cada vez que el terminaba, llenaba por completo su calida cueva de amor con su incandescente liquido, tanto que unas gotas salían de este, al igual que su boca, tratando ella de saborear la mayor parte de el mientras recorrían sus labios y mejillas, sus pulmones se vaciaban al gritar de placer por la fuerza y el gozo de tantos orgasmos fuertes y placenteros, casi hasta quedar afónica de su garganta, el aliento le hacia falta por gemir y gritar de placer, incluso era tan intenso ese placer que aunque se mordieran y arañaran mutuamente, les era sumamente placentero, nada desagradable, era un deseo sexual increíblemente alto e imparable.
 
Tadao daba todo lo que tenia para poder complacerla, TODO, trataba de hacerla gritar, de suplicar por mas, de nunca detenerse, de darle la mayor cantidad de orgasmos que ella jamás haya recibido, uso cada onza de su energía para poder hacerla ver estrellas, y por como estaba la situación, lo estaba haciendo muy bien, podía verlo en su rostro, lleno de una gran sonrisa, sus mejillas siempre coloradas, y como sus gemidos demostraban complacencia en todo momento.
 
Algo que si le gustaba a ella era que el probara su miel en todo momento, el sentir como su lengua perforaba su incandescente hendidura de placer, hacia que gritara mas y apretara mas sus senos con sus manos, pellizcarlos con las yemas de sus dedos, incluso lamerlos desenfrenadamente, al parecer tenia una gran destreza con su lengua en esa área.
 
Claro también ella disfrutaba de complacerlo con su lengua de la misma manera, y también como era introducido el miembro de su compañero en su boca, succionándolo, metiéndolo y sacándolo rápidamente, como usaba sus manos para frotarlo mas rápidamente mientras lamía la punta de este, luego colocándolo en medio de sus senos para frotarlo mas rápido y luego introducir la punta en su boca, era demasiado placer para el contenerlo, lo cual hizo que el terminara mas rápido cada vez debido a la gran maestría con que ella lo hacia, siempre terminando su cara y su boca empapada de su liquido blanco.
 
Eran tan buenos uno con el otro que incluso lograban orgasmos doble, triples, y quizás cuádruples, la cuenta de estos se perdió después de los 30, y aun continuaban
 
Pero como era de esperarse……. La resistencia no era el fuerte de Yokoshima….
 
Al igual que los otros chicos, el también comenzó a perder sus energías poco a poco, sus movimientos, actos, acciones comenzaron a parecer lentos y torpes, lo cual disminuía el placer de la insaciable chica, haciendo que ella se percate de esto, y haciéndole saber que estaba logrando su objetivo.
 
Sus labios y lengua le dolían, igual que los músculos de su cintura, y más que todo su miembro también le dolía de tanto placer que recibía, a tal grado que todo pasó de ser agradable a sumamente desagradable.
 
-Lo supuse -dijo mientras lo miraba a los ojos- quizás hayas resistido mas que los demás chicos, y lo haz hecho de maravilla, pero no fue lo suficiente para poder complacerme, ahora comienza la verdadera tortura.
 
Luego ella tomo el control de la situación, hacia todo lo que fuera placentero para Tadao, como si aun no hubiera comenzado, pero cada vez que el terminaba, era una rara mezcla de dolor y placer, ya que poco a poco iba llegando al limite de su resistencia.
 
Trataba de detenerla, pero estaba muy débil y ella aun continuaba, no se detenía, ni tampoco los orgasmos que le daba, pero cada vez eran con mas dolor que placer, era como si ella absorbiera su vida o que intentaba matarlo de placer, ya no parecía tan agradable el momento.
 
-No eres un hombre de verdad, simplemente eres un debilucho, al igual que tus otros amigos, me dan mucha lastima ustedes.
 
El dolor era casi insoportable, casi no podía pensar con claridad, sus fuerzas lo habían abandonado, parecía como si el estaba a punto de desmayarse.
 
Pero al escuchar la impertinente burla de Minako, recordó como Misao y Asuka lo maltrataban, y había prometido no volver a ser un esclavo de las chicas autoritarias.
 
Su sangre comenzó a hervir de furia, y una vez mas su potencial se activo como cuando estuvo con Misao.
 
Rápidamente la coloco en el suelo y el se coloco encima de ella, mirándola con ojos de ira y decisión, lo cual intimido a la chica por completo.
 
-Te demostrare que tan débil soy en realidad.
 
Quien sabe donde, como o porque, pero de pronto una gran energía nueva salio del joven enfurecido, y volvió al ritmo que tenia hace unos momentos, claro que todo su cuerpo le dolía, mas su miembro, pero el continuo y continuo, haciendo todo lo descrito anteriormente, mas rápido y mas fuerte que nunca.
 
La chica estaba impresionada y ahora ella era la que no podía pensar claramente, era demasiado placer para que ella pudiera soportarlo, era demasiado, incluso su aparente voracidad parecía un chiste comparado con la fuerza y rapidez de su compañero.
 
Hizo de todo, DE TODO, de una manera mas rápida que jamás el haya logrado hacer, los gritos de ella nunca cesaron, incluso aunque ella ya estaba casi afónica, continuaba gritando y gimiendo por el éxtasis de placer que el estaba haciendo para ella.
 
La noción del tiempo se perdió por completo, cuando el puedo reaccionar de su ráfaga de ira, se percato que ya era de noche, porque la luz de la luna alumbraba un poco el gimnasio, y también observo a Minako, completamente dormida y al parecer sumamente complacida.
 
El no sabia que hacer, estaba confundido, y aun no podía creer que lo había logrado, pero luego sintió que su cuerpo le dolía mucho y no tenia muchas energías.
 
Al poco tiempo después, encontramos a Tadao y Minako ya vestidos, el la llevaba en sus brazos mientras ella dormía pacíficamente, por suerte conocía donde vivía ella y decidió llevarla a casa, y claro explicándoles a sus padres que fue atacada por un bandido y quedo inconsciente, para poder calmarlo y que no se preocuparan.
 
Al día siguiente, Tadao llego a la escuela, aunque parecía que sufría de un grave problema de sueño y casi no podía quedarse despierto, el dolor aun permanecía pero al menos pudo soportar el día completo.
 
Algo muy interesante que el escucho al principio del día fue que escucho la lista de los que se habían ausentado ese día, escucho el nombre de Minako que se reporto enferma y que no llegaría a clases por una semana, y al escuchar eso se asusto/impresiono de la noticia, al igual que sintió un poco de alivio y orgullo de realizar otra hazaña increíble.
 
Pero una vez más, no se percataba que Shunrei observaba a Yokoshima desde su asiento.
 
-Vaya, vaya, vaya, quien lo diría, al parecer Tadao es más de lo que aparenta, ha superado todas las pruebas y es exactamente lo que creía que el era, tiene un gran potencial, esto hará las cosas mas interesantes para ti Akane, pero aun faltan algunos mas que debo preparar para ti, y el tiempo se acaba rápidamente, nada mejor que trabajar bajo presión ¿no lo creen?...