InuYasha Fan Fiction ❯ Dr. Mounstro ❯ El roommate ( Chapter 4 )

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N/A: Los pensamientos de los personajes los encierro con **

Para G27, tu mail me conmovió y para complacerte aquí esta el encuentro entre Rin y Sessh ^^

Quiero agradecerles nuevamente por leer mis fics hay varios reviews anónimos que no he podido agradecer así que lo hago por este medio.

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Capítulo 4

El Roommate

Rin se había levantado muy temprano para mudarse. Mientras caminaba con una caja en la mano se sentía algo nerviosa porque tendría un compañero, un estudiante de medicina, pero no sabía si iba a ser hombre o mujer. Detrás de ella Koro llevaba su equipaje y demás cajas por el pasillo.

Se detuvieron en el apartamento 2B, estaba en el 2 piso y tenía una vista hermosa de los parques al otro lado de la calle. En el centro de la residencia para futuros médicos habían plantados 5 frondosos árboles y todo se apreciaba limpio y tranquilo.

Rin puso la caja en el piso y abrió la puerta, una vez dentro se puso feliz porque el apartamento era más bonito de lo que había imaginado. Parecía nuevo y estaba totalmente amueblado. Sin ser demasiado grande era cómodo para dos personas. Un gran ramo de flores adornaban la mesa de la cocina, al leer la tarjeta agradeció su cambio de actitud:

`Que disfrutes tu nuevo hogar con amor. Dr. Otosan & Deborah'

Rin inspeccionó el lugar rápidamente, ambos cuartos parecían ser del mismo tamaño y compartían el mismo baño. La cocina y la sala eran cómodas. Después de revisar todo el apartamento con la mirada, escogió el cuarto mas alejado de la puerta y empezó a desempacar. Koro dejó las cajas mientras salía a traer el resto.

En cada cuarto había una cama nueva por lo que supuso que su padre había gastado una pequeña fortuna en muebles. Abrió las puertas de su closet y empezó a sacar su ropa. Rin vestía totalmente casual, tennis, jeans y una camiseta de algodón. Llevaba el cabello recogido con una prensa dejando varios mechones sobre la frente.

Cuando salió de la habitación vio cajas en el otro cuarto. Su roommate ya estaba ahí e inmediatamente se hizo mil preguntas de cómo sería aquella persona. Ninguna de sus preguntas se acercaba remotamente a la realidad, de pie en la puerta con una caja en las manos, estaba Inuyasha que la miraba extrañado

"Rin???"

"Inuyasha que haces tu aquí?"

"Ayudo a mi hermano a mudarse!"

"…tu hermano? En serio? Que bueno"

En ese momento Inuyasha sintió como su hermano lo empujaba por la espalda para que entrara.

"Inuyasha muévete que rayos pasa contigo?"

Cuando atravesó la puerta y la vio, el encuentro del aeropuerto le llegó como un violento flash. Se mordió la lengua al verla sonreír, porque era obvio que no lo recordaba

"Hola mucho gusto soy Rin!"

Sesshoumaru no le contestó de inmediato pero si le estrechó la mano que ella le ofrecía y esbozó una tenue sonrisa.

"Encantado Sesshoumaru Youkai"

Rin iba a decir algo pero se quedó viéndolo con los ojos entrecerrados y la alegre sonrisa se fue desvaneciendo rápidamente. Al estar junto a él había reconocido su aroma y el tono de su voz. Cerró los ojos esperando estar equivocada.

Junto a ellos Inuyasha no comprendía porque su amiga tenía aquella expresión de horror. Se volvió hacia su hermano, Sesshoumaru miraba a Rin con una expresión más arrogante que de costumbre y por mas raro que eso fuera, parecía sonreír, la primera en hablar fue Rin.

"Esa voz, ese aroma….no, no, no….Rayos!! Eres tu no es cierto? Eres el grandulón del aeropuerto. Me dijiste torpe!!!

"Mi nombre es Sesshoumaru no grandulón!"

"Ay como sea pero porque TU??? No puede ser…me caes mal!" - Rin hacía pucheros con la boca mientras fruncía el ceño, no podía creer que el hermano de Inuyasha y el hombre del aeropuerto fueran la misma persona, menos que de todos los roommates posibles le hubiera tocado precisamente él.

Inuyasha los miraba confundido, Sesshoumaru estaba divertido de ver que ella se ponía roja como un tomate y al escucharla llamarlo grandulón, aquellas palabras extrañamente lo pusieron de buen humor.

Cuando Inuyasha les preguntó si se conocían Rin contestó que no y Sesshoumaru solo murmuró un `si' que hizo que ella se volviera a verlo con los ojos ardiendo en cólera.

Rin se detuvo para detallar a los hermanos buscando el innegable parecido en sus facciones a pesar del color de su cabello. Sesshoumaru tenía el cabello corto pero era de un rubio tan claro que prácticamente era blanco. La melena azabache de Inuyasha le llegaba casi a la cintura.

Al verlos Rin recordó el comentario de Kagome y ahogó una risita, no podía negar que eran apuestos pero guardó la imagen de los ojos ámbar de Sesshoumaru en el olvido. No podía estar enojada con él si estaba pensado que tenía ojos hermosos. Ignorando a Sesshoumaru, le preguntó a Inuyasha si por casualidad se había equivocado de apartamento, cuanto su amigo le negó con una sonrisa, Rin resopló abatida.

"...Maldición y yo que no quería molestar a mi papá. Koro tenemos que irnos!"

Volviéndose hacia Sesshoumaru le habló gesticulando con ambas manos en un arrebato de agresividad, que al estudiante de medicina le pareció adorable y divertido.

"Y tu grandulón me caes mal me arruinaste el traje y ahora esto, arrrgggghhhh!!"

Koro miró a Rin sorprendido. Nunca la había visto perder la dulzura de carácter de aquella forma. Sonrió calladamente porque era claro que aquel hombre serio y taciturno despertaba todas y cada una de las fibras de su interior, haciéndola explotar como una niña malcriada y consentida.

"Pero Rin que sucede quien es él?"

"Te acuerdas mi traje manchado…fue él! Este grandul…Sesshoumaru o como rayos se llame fue el que me dijo torpe…ha! y ya me acordé también contesta el teléfono como un cavernícola!"

Sesshoumaru no dijo nada, no podía negar su falta de etiqueta por teléfono pero se negó a cederle terreno a Rin. Al escucharla Inuyasha se echó a reír porque era refrescante ver a una mujer que no se dejara llevar por el atractivo de su hermano.

"Koro vámonos creo que después de todo viviré con ustedes!"

Al escucharla totalmente resignada Sesshoumaru se revolvió internamente, si no hacía algo rápido iba a perder de vista aquella mujer tan desconcertante que despertaba un sentimiento de bienestar en su interior. Con su acostumbrada calma y voz pausada se digirió a Rin.

"Podrías decirme si tu estudias medicina?

"…Yo? pues…no… estudio Historia…!!"

Rin pareció zambullirse más en su derrota al verse totalmente expuesta. En ese momento fue muy claro para ella que estaba en el lugar equivocado. Aquella sensación le provocó ardor en el pecho por la ansiedad, tanto que se llevó la mano a la sien en un intento inútil de aplacar el inminente dolor de cabeza pero disfrazó aquel sentimiento con una risita nerviosa.

"Ja ja ja Koro discúlpame hicimos el viaje en vano!"

"Pero Rin…!"

"Tranquilo Koro, ni modo!"

En silencio Rin suspiró profundamente, entró al cuarto y sin pensarlo dos veces comenzó a empacar todo de nuevo casi al borde de las lágrimas. Todos sus planes de no molestar a su papá se estaban viniendo abajo y eso la mortificaba.

El cambio de actitud descontroló a Sesshoumaru por completo, dándole una punzada en el estómago. Sabía de sobra que la sonrisa de Rin ocultaba la desilusión de no poder quedarse. Verla con aquella expresión tan desanimada lo conmovió hasta la médula.

Inuyasha se volvió para ver a su hermano que entrecerraba los ojos tal y como lo hacía cuando pensaba en algo importante, estaba a punto de reclamarle pero se detuvo porque su hermano dejó la caja y entró al cuarto de Rin. De pie en la puerta, la observó llevarse la mano al rostro evidenciando sus lágrimas.

El verla de esa forma le provocó un sentimiento de culpa extraño, porque hasta ese momento nunca se había sentido así por nadie. Se hizo notar tosiendo levemente, al escucharlo Rin se irguió y dejó caer las manos a sus costados, cuando le habló la voz le salió seca y arrogante dibujando una sonrisa en Sesshoumaru.

"Que rayos quieres…ya me voy no es necesario que vengas a echarme!"

"Me dejas hablar por favor… mal educada?"

"…"

"Pasaré la mayor parte del tiempo fuera estudiando. Quédate si tanto significa para ti!"

"...aah?"

"Ya me escuchaste o además de despistada estas sorda?"

"Mira grandulón…en serio pasarás estudiando?"

"…Si"

De pie frente a él Rin lo miraba fijamente, como si quisiera descubrir sus intenciones y dándole tiempo a Sesshoumaru para admirarla. Tenía los ojos más verdes que él hubiera visto en su vida y la forma de sus labios era suave y delicada. Verla sonreír era como una luz que lo cegaba robándole el autocontrol.

"Gracias Grandulón!!"

Sesshoumaru salió del cuarto y le hizo un gesto a Inuyasha para que siguieran con la mudanza como si nada hubiera pasado, pero a su hermano menor lo dominaba la curiosidad y no se aguantó las ganas de preguntarle.

"Oy que pasó? De donde se conocen?"

"mmm! En el aeropuerto hace 4 días. Me regó mi café y me dejó hablando solo… es muy agresiva!" - Sesshoumaru sabía perfectamente que Rin estaba de pie en la puerta del cuarto escuchando, por lo que con la seguridad de que ella se quedaría con él, no dudó en provocarla.

"Ah que necio eres!! Tú fuiste...no le creas nada Inuyasha!"

"Ves hermano? Agresiva!!"

"Arrggg no te soporto!"

"Eres muy despistada pequeña!"

"Que no me digas despistada y no soy pequeña!!"

"....."

Koro estaba a punto de estallar en carcajadas, le parecía muy divertido ver a Rin rabiar como cuando era niña, dio media vuelta y continuó trayendo más cajas. Inuyasha los miraba totalmente sorprendido, tomando aire empezó a mover los labios.

"Entonces quiero saber, te quedas o te vas Rin?"

"Se queda!"

"…"

En aquel momento a Rin le pareció que además de grandulón y grosero era mandón pero se quedó callada. Había algo diferente en su voz, un tono posesivo y autoritario pero no le importó, porque a pesar de su actitud arrogante; Sesshoumaru dejaba ver que era un hombre amable y considerado.

Durante la mudanza Sesshoumaru hizo discretas pausas para ver a Rin con detenimiento. A pesar de su gusto por las mujeres rubias ella le parecía bella e interesante. No estaba seguro si eran sus ojos o la agresividad a flor de piel; pero para él, que estaba acostumbrado a que las mujeres se echaran a sus pies, Rin era una novedad demasiado estimulante para pasarla por alto.

Aprovechando que prácticamente tenía todo desempacado, se sentó en la cama para verla mientras conversaba con Kagome que había llegado hacía rato. Su cuñada no dejó de sonreír mientras Rin le relataba como el bruto del aeropuerto era él. Cuando Kagome le dijo que era una despistada Sesshoumaru hizo de eso una victoria silenciosa.

Ahora estaba ahí sentado viéndola desempacar libros como hipnotizado. La parte responsable de su ser le recordaba a Susan cada tres segundos comparándola con Rin, pero al mismo tiempo la frescura de su compañera de cuarto lo atrapaba.

Rin además de linda, era dueña de un cuerpo escultural. Su piel se veía sedosa y muy acariciable. Los rasgos de su cara eran delicados y contrastaban bellamente con sus ojos y larga, abundante y negra melena. Sesshoumaru parpadeó porque de repente Rin le recordó a una gatita, ojos verdes, pequeña, delicada y agresiva. Reparando en la curva abundante, firme y seductora de sus senos suspiró.

A pesar de estar comprometido, él era un hombre que reconocía a una mujer sensual cuando la veía. Que la mujer no pareciera consciente de su atractivo era más estimulante todavía. Compararla con una gatita y estar perdido en sus curvas solo era parte del problema. Vivir juntos sería su mayor reto porque estaba seguro que aquella gatita le iba a ocasionar muchas distracciones.

**Yo puedo estudiar sin que esa pequeña gatita me desconcentre yo soy el importante y poderoso Sesshoumaru Youkai…**

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Después de un rato Koro le dijo a Rin que ya habían terminado.

"Esa era la última caja!"

"Ay que bueno!"

"Rin estás segura de querer mudarte?"

"Si Koro-sama, él va a estudiar mucho. Me lo aguanto con tal de no ser una molestia para Deborah y mi papá."

"Como tu digas Rin!"

"Muchas gracias por la ayuda Koro-sama. Dime Inuyasha tu hermano siempre es tan odioso?"

"Si, es desesperante pero por lo visto tu puedes manejarlo muy bien!"

"Lo dudo, mira que pequeña es!"

Rin se sobresaltó al verlo junto a ella. Al tenerlo tan cerca respiró su agradable y masculino aroma. Con una risita se dio cuenta que eso era lo único que recordaba de él hasta ahora. Sentir su suave respiración sobre ella y que la mirara bajando la cabeza, era prueba tangible que junto a él era una pequeña.

Ella sabía que era alta, pero contra aquel estilizado y varonil hombre supuso que la única forma que lo alcanzaría, era si se ponía sus zapatos más altos. Se quedaron así unos segundos hasta que sin que Sesshoumaru pudiera prevenirlo, Rin le dio un inofensivo puñetazo en el estómago que lo hizo encorvarse.

El estudiante de medicina se volvió a mirarla con los ojos iluminados, más por la sorpresa que por el dolor. Ahora que estaban más o menos a nivel, Rin se inclinó sobre él con una expresión de triunfo. Después, con el dedo índice le levantó la barbilla con delicadeza, suficiente para que sus ojos se encontraran. Con sus rostros a pocos centímetros uno del otro, Rin le habló con voz suave y vibrante.

"Ya te dije que no me digas pequeña!"

"mm! Cuanta agresividad, pareces una gatita!" - las palabras de Sesshoumaru fueron un murmullo porque estaba totalmente perdido en la mirada esmeralda.

Cuando la llamó gatita Rin se mordió el labio inferior y soltando una risita deslizó su dedo fuera de barbilla de Sesshoumaru.

"Oye Grandulón no me digas gatita!!"

"…!!"

Sesshoumaru esperó a que ella se alejara para regresar a su cuarto y seguir desempacando con la sensación de los dedos de Rin sobre su piel. Después de eso no hubo más intercambios de palabras amables entre ellos. Ahora, mientras Inuyasha conectaba la televisión, Kagome ayudaba a Rin a acomodar sus zapatos.

"Me parece muy gracioso que Sesshoumaru sea el bruto del aeropuerto!"

"Si verdad? Quien lo hubiera dicho, pero creo que no es tan malo después de todo!"

"Ah?" - Kagome pretendía no enterarse del tono emocionado en la voz de su amiga y fingía desinterés.

"Es que me permitió quedarme!"

"Ajá!"

"Bueno eso es todo voy al baño para ordenar mis cosas!"

Kagome se incorporó con una sonrisa porque conocía a Rin a la perfección y sabía cuando estaba emocionada, como ahora. También sabía que Rin era súper distraída y no se daría cuenta a menos que ella se lo dijera, pero cuando estaba con Sesshoumaru la química entre ellos eran tan tangible que prácticamente se podía contener en un tubo de ensayo.

Kagome estaba especialmente emocionada porque al verlos, los ojos de Sesshoumaru brillaban tanto o más que los de Rin. Sin embargo, contuvo su emoción para sí misma, sabía de sobra lo correcto que era su cuñado y el respeto que tenía Rin por cualquier hombre comprometido. A pesar de eso la idea de algo más sucediendo entre ellos, la llenaba de emoción.

Feliz se acomodó el cabello y se fue a sentar a la sala, esperando que su novio terminara. Cuando Inuyasha la vió dejo todo y se recostó en el regazo para que le hiciera cariño en la cabeza. Pero Kagome estaba distraída pensando en Sesshoumaru y Rin.

Aprovechando esto, Inuyasha se levantó inclinándose hacia atrás para así poder ver más allá de la camisa ligeramente abierta de su prometida. La posición en que estaba le permitía ver el perfil de los hermosos senos de su novia, adornados con el encaje de la ropa interior color rosa.

Sin pesarlo dos veces, Inuyasha apartó la camisa y se inclinó para besar el escote con la boca apenas entreabierta. Lo suficiente para que la humedad de su lengua acariciara la cremosa piel. Cuando lo hizo Kagome soltó una risa y tomó el rostro de su novio con ambas manos para hacer contacto visual.

"Ahem! Se puede saber que haces? Nos pueden ver!"

"Y? Hueles delicioso, eso sin contar que eres mía y eso incluye cada parte de tu cuerpo, por lo tanto son míos y los beso cuando quiera!"

"Eres un…"

Inuyasha silenció a Kagome deslizando la mano sobre ella y buscando llegar a la unión entre sus piernas bajo su diminuta falda. Ella no pudo controlarse y se retorció de placer entre sus brazos abriendo las piernas ligeramente para darle un vistazo de lo que con tanto entusiasmo Inuyasha trataba de acariciar.

Al ver la ropa interior por un instante Inuyasha se acercó al cuello de su prometida y empezó a besarla con suavidad, acariciando sus piernas. No pasó mucho tiempo para que el momento romántico fuera interrumpido por los gritos de Rin y los gruñidos de Sesshoumaru que discutían en el baño con la puerta abierta. Kagome se acomodó en el pecho de su novio y se puso a oírlos con una sonrisa.

"BAKA!! Ten más cuidado esos son mis perfumes!"

"… En donde su supone que voy a poner MIS cosas?"

"Y como voy a saberlo, aquí en este espacio!"

"…'Este espacio' como tu le dices es invisible. Guarda tus perfumes en tu cuarto!"

"No quiero, no me des órdenes!"

"Um! otra vez pareces una gatita...."

"Grrr!!" - frustrada por la serenidad de Sesshoumaru Rin pateó el piso con una rabieta.

"Tsk Tsk!! Sin pataletas o te meto a la ducha para que te calmes!"

"No te tengo miedo Grandulón!!!" - Divertido, Sesshoumaru la tomó por un brazo con gentileza fingiendo que iba a lanzarla a la ducha

"............ay abusador, está bien la mitad para cada uno y No toques mis cosas con tus manotas"

"No me insultes, estas manotas como tu les dices pronto salvarán vidas!"

"Humph! Quien se va querer tratar con un doctor tan mal encarado!!"

"Que insolente eres pequeña!!"

"QUE NO ME DIGAS PEQUEÑA!!"

"Guarda tus perfumes en tu cuarto…pequeña!"

"Solo para que no los toques grandulón!"

"Dr. Grandulón para ti!"

Al escucharlos Inuyasha se quedó pensativo un segundo, no recordaba a su hermano en una actitud como la que estaba presenciando. No siguió pensando en eso porque la mano de Kagome se escurrió bajo su camisa, recordándole que tenían asuntos pendientes.

Feliz, Inuyasha tomó a su prometida de la mano y se despidieron de su hermano y Rin. Koro salió con ellos dejando al grandulón y la gatita solos.

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N/A: Wow!! Por fin lo terminé este capitulo requirió tanto retoque…uff! Que bueno que ya está listo espero les guste!! ^^