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Capítulo 12

Sábado por la tarde…

……………

Al levantarse percibió el olor de comida que venía desde la cocina, junto con la conversación de sus compañeros. Miró el reloj junto a su cama, eran casi las 11, bostezando se sentó al borde de la cama un momento. Despacio se incorporó y abrió la puerta del baño, puso el cerrojo y se metió a la ducha.

Minutos más tarde, salía con un jeans, una camisa de negra de algodón y el cabello aún húmedo. Al abrir la puerta de su cuarto todos lo saludaron amigablemente, especialmente Kira pero él fijaba su mirada en Rin que estaba de pie frente a la cocina con su atuendo de Chef. Le encantaba verla así vestida, toda de blanco y visiblemente disfrutando de poder cocinar cosas ricas, como ella les decía. Todos lucían descansados y felices.

Al acercarse a la mesa Rin le sonrió y le ofreció desayuno y en lugar de sentarse con sus compañeros se quedó junto a ella, mientras daba mordiscos a su omelette. Rin se la había preparado tal y como a él le gustaba, con mucho tocino, trozos de jamón y una cantidad descomunal de queso.

Al verlos Kira arrugó la boca fastidiada. La noche anterior había tenido la esperanza de acercarse a Sesshoumaru un poco, pero como siempre él se mostraba indiferente. La despampanante rubia comenzaba a pensar que definitivamente Sesshoumaru era una pérdida de tiempo, a pesar de sus atributos y encantos él simplemente se negaba a caer rendido ante ella.

Después que Sesshoumaru terminara con la omelette Rin le entregó un vaso con jugo de naranja y después se deshizo de su traje de Chef, para dejar al descubierto la camisa azul marino que enmarcaba su rostro en contraste.

Al verla con aquella camisa Sesshoumaru sintió un delicioso escalofrío correr por su espalda y ansió que todos sus compañeros se fueran para poder estar solo ellos dos. Quería salir lo más pronto posible del apartamento para evitar que Kouji se apareciera de sorpresa.

"Como dormiste doctor? Te sirvió el masaje!"

En la mesa junto a ellos Kira se revolvió en el asiento y Jaken se hizo el tonto aunque por dentro estaba más convencido que antes que Sesshoumaru y Rin eran la pareja ideal.

"Mucho. Gracias pequeña. Estas lista para irnos?!"

"Si!"

Sesshoumaru podía ver que Rin estaba emocionada por salir juntos y aunque él no tenía la facilidad de expresión de su roommate, esperaba poder demostrarle lo mucho que disfrutaba su compañía con una tarde inolvidable.

"Iré a traer mi cartera y a lavarme los dientes"

Al escucharla disimuladamente Kira se puso de pie y entró al baño. Tal y como pensaba Rin se estaba lavando los dientes frente al lavamanos. Cuando la vio levantó la vista pero antes de que ella pudiera decir algo Kira cerró la puerta tras de sí.

Rin se quedó inmóvil con el cepillo entre sus dientes y la boca llena de pasta, la mirada que Kira le daba era muy intimidante. Con tranquilidad se enjuagó la boca, puso el cepillo en su sitio y se volvió para enfrentar a Kira.

"Tu no me engañas!"

"Disculpa? No te engaño, que quieres decir con eso Kira?"

"Tu y Sesshoumaru!"

"…mmm…somos solo amigos!"

"Ha!! Amigos ay por favor! Te trata demasiado bien para que sean solo amigos! Al resto del planeta nos trata como si tuviéramos lepra y para ti son solo palabras amables, al menos admítelo!"

Rin respiró profundo, la actitud agresiva y grosera de Kira la estaba sacando de sus casillas. Ella quería mucho a Sesshoumaru pero las insinuaciones de aquella leona atacada por los celos le estaban agriando el día.

Cerró los ojos y en ese instante se le iluminó la mente con una idea, probablemente no era la opción menos dolorosa, pero si la más efectiva. Cuando volvió a hablar Rin trató de sonar amable, evitando ser ofensiva o grosera.

"Creo que exageras nos llevamos bien eso es todo…Kira-san…te gusta mucho verdad?"

A Kira se le notó la impresión en su mirada, era obvio que Rin no era la persona que ella creía y con cada minuto que pasaba se sentía más fuera de lugar. Incapaz de disfrazar su enojo y frustración por más tiempo Kira le contestó con la frente en alto que quería que Sesshoumaru fuera su novio.

Al escucharla Rin se mordió el labio preocupada y convencida de que ahora más que nunca tenía que quitarle la venda de los ojos. Era claro que Sesshoumaru no tenía pensado decirle nada sobre Susan con la esperanza de que Kira entendiera sus indirectas y frío comportamiento.

"Ya veo…lo que pasa es que…disculpa pero creo que tienes que saberlo. Se ve que eres una mujer de buenos sentimientos además de hermosa. Me parece injusto que desperdicies tus energías en algo sin sentido!"

"Algo sin sentido…?"

"Kira-san, él está comprometido para casarse!"

El color de Kira se le fue tan rápido de la cara que la Chef pensó que se iba a desmayar. Rin la vio llevarse la mano a la cara con la cara desfigurada por el baldazo de agua fría que acababa de recibir.

"C-casarse? P-pero…yo no sabía!"

"Lo siento!"

La mirada de Kira era vacía y veía a Rin completamente desubicada. Antes de que pudiera decir nada Rin empezó a hablar para darle ánimos.

"Kira estás bien?"

"Eso creo…comprometido. Entonces de verdad ustedes son solo amigos!"

"Sí!"

"He sido una tonta, todo este tiempo…por Kami! Yura tenía razón…pero…tu pareces conocerlo muy bien, verdad que no me equivoco? El tiene muchas cualidades!"

"En eso tienes razón, el doctor es una gran persona. No pudiste haber escogido mejor!"

Rin observó que Kira parecía meditar y le extrañó verla sonreír. Después de todo no parecía tan afectada por la noticia como ella pensaba.

"Si no me hace caso porque tiene una novia…eso quiere decir que mis encantos están intactos!"

"Ja ja ja ja creo que sí! Además con tú eres muy bonita e inteligente, debes tener muchos admiradores!"

Kira miró a Rin con una gran sonrisa tocándose el cabello como acicalándose. Y antes de irse le guiñó un ojo.

"Mm! Ahora solo es cuestión de encontrarlos. Gracias por decirme y disculpa que haya sido tan grosera!"

"No hay problema!"

En el momento que Kira abría la puerta se topó con Sesshoumaru de frente, al ver que estaban juntas en el baño frunció el ceño.

"Que pasa aquí…Rin estás bien?"

"Sí…estábamos despidiéndonos!"

"Así es, hasta el lunes Youkai!"

La hermosa rubia rodeó a Sesshoumaru y salió del baño dejándolo asombrado con su actitud completamente casual. Yura, Kira y Jaken se despidieron de ellos desde el comedor dejándolos finalmente solos. Una vez que la puerta se cerró Sesshoumaru interrogó a Rin.

"Pequeña, que estabas hablando con Kira?...no me mientas!"

"Bueno mira, espero que no te enojes…yo le dije que tu estabas comprometido para casarte…lo que pasa es que ella se metió al baño y se puso muy agresiva diciendo que tu y yo teníamos algo y que por eso tu no le hacías caso!"

"Mm!...no me importa! Se quedó tranquila?"

"Si bastante!"

"Bueno un problema menos! Lista?"

"Siiii!"

……………………

Mientras caminaban rumbo a la estación del metro Rin quiso saciar su curiosidad respecto a la prometida de su roommate.

"Te puedo preguntar cosas?"

"Cosas…que cosas?"

"Porque no tienes fotos de tu novia en el apartamento?"

"Ahh esas cosas…pues, creo que las dejé todas en Boston porque la repentina curiosidad?"

"Solo curiosidad, su nombre es Susan verdad? Susan que?"

"Thomas!"

"Ajá y que edad tiene?"

"29"

"um! Un año mayor que yo…es muy bonita verdad Kagome me lo dijo! Y cuando viene a visitarte?…Kagome dice que seguramente van a tener bebes rubios como rayitos de sol!"

"Si es bonita y no tengo idea de cuando vaya a venir…porque tantas preguntas y explícame que mas hablan Kagome y tu de mí?"

Sesshoumaru se sentía incómodo, quería pasar la tarde con Rin y hablar con ella de su lejana novia no era su idea de tema conversación con su gatita. Deseaba estar con ella sin pensar en nadie más. Al notar la fibra de desesperación en la voz de su roommate Rin se volvió a verlo con una sonrisa.

"Ya voy a terminar con el interrogatorio grandulón no te pongas arisco!"

"Ah, interrogatorio? Como que arisco??"

"Solo me intereso por ti Dr. Youkai, cuanto tiempo llevas con Susan? Kagome dice que le diste un anillote, claro me imagino que es un belleza con tu gusto"

Sesshoumaru escuchó la pregunta pero estaba embelezado por la forma de Rin de llamarlo Dr. Youkai. Sonaba tan bien en labios de Rin que por un instante le provocó abrazarla.

"Llevo tres años y bueno su anillo es lo mejor que encontré…un anillote?? Rin en serio dime que hablas tu con Kagome de mí?"

"Je je je je no te preocupes no siempre hablamos de ti, además si alguien quisiera decir cosas feas tuyas, se las verá conmigo!"

"…"

Aquellas palabras resonaban en su cabeza como una razón más por la que Rin era merecedora de su paciencia, tolerancia y cariño. Ya estaban en la estación del metro y Rin le preguntó a donde iban de compras.

"Que vamos a comprar?"

"Ropa, un par de trajes para ser exacto"

"Y eso?"

"Es que debo acompañar a Inuyasha a varias reuniones y no tengo ropa adecuada!"

"Pero yo pensé que Inuyasha se encargaba de la empresa!"

"Así es, pero él quiere que la gente nos vea de vez en cuando juntos. Después de todo la empresa pertenece a los dos!"

Sesshoumaru reparó en la expresión tierna de Rin y la miró intrigado.

"Que?"

"Se nota que lo quieres mucho!"

"Porque no habría de hacerlo? Ese insecto es la única familia que tengo!"

"También me tienes a mí, yo sé que solo somos amigos, pero puedes contar conmigo para lo que sea…mira ese es nuestro tren!"

Sesshoumaru la siguió con un sentimiento cálido rodeando su corazón. Rin era única y en momentos como este deseaba poder ser más que su amigo porque tenerla tan cerca le daba un vistazo de cómo podría ser su vida si ella lo quisiera a él.

Al entrar al tren había tanta gente que Rin tuvo que apoyarse de espaldas a una ventana de frente a Sesshoumaru, en pocos minutos el vagón estaba tan lleno de gente que sus cuerpos estaban prácticamente pegados. Al sentir el roce del pecho de su roommate Rin se sobresaltó y los latidos de su corazón se aceleraron de repente.

(mmm! es muy alto, huele muy rico, es super varonil y…apuesto que sus abrazos son muy fuertes con esos brazotes…lo que más me gusta son sus ojos tan profundos y claros…jejejeje si me oyera Kagome se burlaría de mí y mi soledad…)

Los pensamientos de Rin se quedaron en blanco cuando sintió todo el peso de Sesshoumaru sobre ella, cuando levantó la vista, sus ojos se encontraron y se dio cuenta que él le sonreía.

"Disculpa, no te aplasté o sí?"

"No, es que hay mucha gente!"

Sesshoumaru apoyaba ambos brazos a cada lado de Rin, tenerla tan cerca casi abrazándola era tanto angustiante como agradable. Percibía cada centímetro del pecho femenino rozándolo y el perfume de Rin se le metía por los poros envolviéndolo.

Cuando hicieron una parada y más gente entró al vagón otra vez se vio felizmente `aplastada' por su roommate. Con total naturalidad y soltura Rin rodeó a Sesshoumaru con ambos brazos pegándose completamente a él.

"No te importa verdad? Es que un apretón más de esos y me sacas el aire…en serio eres un grandulón!"

"…"

Sesshoumaru solo asintió con un leve movimiento de cabeza, no tenía argumentos con que negarse a la delicia de estar abrazado con su gatita. Deseaba que les faltaran mil paradas para llegar a su destino, pero cuando vio fuera del tren supo que solo hacían falta dos.

………………………

Estaban en una exclusiva tienda de ropa de hombre y Rin esperaba por Sesshoumaru para darle su opinión, sentada una butaca de cuero. El vendedor que los atendía se acercó y le entrego un grupo de corbatas que hacían juego con las camisas que habían escogido.

"Doctor apúrate!"

"Ya voy…!"

Al salir del vestidor, Sesshoumaru se abotonaba la camisa dejando ver su pecho desnudo. Ella tragó en silencio mientras lo observaba. Lo veía a diario y estaba conciente de su físico, pero por alguna razón verlo de esa forma, probándose ropa era muy atractivo.

Sesshoumaru se miró al espejo y luego se volvió hacía ella.

"Te gusta?"

"Aja el azul te queda muy bien…ven probemos con esta corbata!"

Rin se levantó lo obligó a sentarse en la butaca y se dedicó a ponerle la corbata y hacerle el nudo, al terminar Sesshoumaru se puso de pie frente al espejo y ella se paró detrás. Pasando ambos brazos por debajo de los de Sesshoumaru, le acomodó la camisa alisándola sobre su cuerpo, con la mejilla apoyada en el brazo del emocionado doctor.

"Te gusta? Te ves muy guapo!"

"mmm…tu crees?"

"Si!"

(Pero que le pasa? Que no se da cuenta? Otra vez estamos como abrazados, debería ser más cuidadosa, siento escalofríos por toda mi espalda…esas manitas…esas curvas!!!)

Después de escoger todo lo que iba a comprar, Rin le pidió que la acompañara a buscar unas cremas para ella. En la caja Sesshoumaru levantó una ceja al ver la cantidad y variedad de las cremas.

"Porque compras tantas?"

"Me encanta tener la piel suavecita!"

"Para qué?"

"Uno nunca sabe…además si alguien me abraza me gusta oler rico!"

Sesshoumaru comprendía perfectamente las palabras de Rin y evocó el su suave perfume en silencio.

"Te gusta que te abracen?"

"Mucho. Mi papi lo hace con frecuencia, también Kai pero él siempre me hace cosquillas. En cambio Otosan me abraza con ternura y me da besitos en la cabeza!"

"Eso es porque eres una gatita consentida!"

Rin no le dijo nada únicamente se limitó a sonreír. Frente a ellos la cajera pensaba que hermosa pareja hacían y se los dijo, dejando a los dos sin habla. Ninguno se atrevió a decirle que ellos no eran una pareja más que de amigos. Sesshoumaru pudo ver que Rin estaba sonrojada y con un brillo diferente en su mirada.

Después de que Sesshoumaru pagara por las cremas de Rin, alegando venganza por lo de la mesa, salieron a buscar un lugar donde comer.

"Adonde iremos doctor?"

"Donde tu quieras gatita!"

Se lo dijo con una calidez y suavidad que Rin se sintió extraña, completamente consciente de Sesshoumaru como hombre más que un simple amigo. Por un momento estudió al hombre frente a ella, involuntariamente pensando como serían sus abrazos y sus besos.

(Donde yo quiera? Cuando me dice gatita con ese tono de voz parece que estuviera seduciéndome…mmm me encanta que me seduzcan…como será el doctor de pareja??...ay rayos! basta Rin este hombre está comprometido!...por cierto y Kouji no debería haber llamado?? Yo pensé que hablaba en serio…que desilusión!)

Entraron a un lindo y elegante restaurante con un ambiente muy íntimo. Estaban sentados uno frente al otro comiendo y conversando. Rin le contaba sobre su trabajo en el restaurante y de cómo había sido después de la muerte de su madre y de su mudanza a Japón.

Sesshoumaru escuchaba con atención y al escucharla hablar con fervor de su hermano menor se dio cuenta que Kai era tan especial como ella. Rin se percató que su roommate la miraba fijamente e hizo una pausa.

"Que sucede?...estoy hablando sin parar? Es que cuando me emociono…"

"Es cierto, pero no me molesta. En realidad estaba pensando porque no nos habíamos conocido antes siendo la mejor amiga de Kagome?"

Rin terminó de masticar y se puso a recordar algo que ya había olvidado. Una fiesta hacía tiempo en casa de Kagome.

"Oye si nos conocimos…fue en una fiesta en casa de Kagome…tu estabas con una mujer muy hermosa, era rubia pero se quedaron muy poco rato!"

"Entonces si nos presentaron?"

"Bueno más o menos yo te saludé y tu me ignoraste…me quedé con el saludo en la boca. Porque siempre estás tan serio todo el tiempo?!"

Sesshoumaru no sabía que decir rápidamente recordó la fiesta pero no a Rin y si a la mujer con la que había ido, una rubia hermosa y toda una fiera en la cama que no había pasado a más. Otra vez tenía esa sensación de ternura para con Rin y aunque habían pasado casi cuatro años antes se sentía súper mal por haber ignorado a su gatita.

"Ah! Bueno yo…recuerdo esa fiesta pero…!"

"No a mí…no importa yo no soy una rubia despampanante…jejeje ni siquiera soy semi despampanante. Soy solo Rin, la amiga de Kagome ja ja ja…dime siempre has salido con mujeres rubias?"

"Casi siempre!"

"Ya veo…verdad que la comida está riquísima?"

(Solo Rin?? Gatita eres la mujer más increíblemente hermosa por dentro y por fuera que he conocido que a veces creo que eres solo un sueño prohibido y maravilloso)

"Rin…discúlpame por ignorarte!"

"No seas tonto eso fue hace mucho tiempo. Además ahora somos amigos y haces todo menos ignorarme. Sesshoumaru tu amistad significa mucho para mí!"

"Gracias, lo mismo digo pequeña!"

Siguieron comiendo en silencio hasta que el teléfono celular de Rin rompió la tranquilidad de la cena. Sesshoumaru se puso inquieto, hasta el momento había sido una tarde maravillosa, sin Kouji. Cuando Rin tomó el diminuto celular en su mano sonrió feliz y él supo que era Kouji.

………………………

"Hola Kouji!"

"Hola preciosa disculpa que no te llamara más temprano me llamó mi madre y tuve que ir a ayudarla con unas cosas. Lo peor fue que olvidé mi celular. He estado en agonía todo el día sin escuchar tu linda voz!"

"Ja ja ja en agonía? Eres un adulador, y ya terminaste de ayudar a tu mamá?"

"Si tenía pensado entregarme a ti el resto del día para terminar lo que empecé ayer, que dices?"

Con furia Sesshoumaru vio como Rin se sonrojaba riéndose como una niña, quería ser capaz de poder escuchar lo que Kouji le estaba diciendo a su gatita, pero mantuvo su ecuanimidad.

"Ja ja ja...y yo que pensé que te habías olvidado de mí, podemos salir más tarde ahora estoy ocupada!"

"Ocupada? Con quién?…ay no me digas que con ese indiscreto de tu roommate?"

Rin se cubrió la boca con la mano al recordar la noche anterior y vio fugazmente a Sesshoumaru que frente a ella parecía una estatua.

"No le digas así! Te llamaré cuando llegue al apartamento está bien?"

"Como tu digas preciosa!"

"Adiós!"

"Seguiré con mi agonía!"

"Je je je!"

………………………

Cuando Rin cerró el teléfono Sesshoumaru tenía ganas de gritarle y exigirle que no fuera a ningún lado con aquel pegoste de hombre. Era claro que también hoy pasaría la noche solo. Odiaba a Kouji con toda su alma.

"Era Kouji!"

"Si ya me di cuenta, te gusta mucho?"

"Ah? Bueno si me gusta, es agradable y muy cariñoso!"

"Si de eso también me di cuenta!"

"Ja ja ja…!"

Rin siguió comiendo divertida con la actitud de Sesshoumaru, era evidente no aprobaba su relación con Kouji. Aunque a ella eso no le importaba demasiado, se sentía muy sola y aquel hombre seductor y que le decía preciosa era una compañía muy agradable.

Sesshoumaru se tomó todo el tiempo para terminar con la cena aunque Rin no parecía estar muy apurada por irse y eso lo ponía feliz.

"Por cierto Sesshoumaru no te olvides que mañana iremos a casa de mi papá y Deborah!"

"No lo he olvidado pequeña…pero tu novio no se irá molestar?"

"Que no es mi novio y si se molesta ese es su problema. Deborah está empeñada en conocerte, también mi papi!"

"Te llevas bien con ella verdad?!"

"Ahora sí, cuando se casaron no fui muy amigable que digamos!"

"Sacaste la uñas?"

"Necio!! Bueno más o menos, pero ya no me he dado cuenta que mi papá tiene derecho a ser feliz y se que en su corazón siempre habrá un lugar para mi mami!"

Sesshoumaru la admiró mientras comía y le contaba lo mal que se había portado con Deborah al principio y asegurándole que su cambio de actitud había sido por su hermano Kai.

"Si él me convenció que ella quería sinceramente a mi papá, y a mi hermano es muy importante para mí lo quiero mucho…ay por cierto vendrá a visitarme en un par de semanas, te importaría que pase unos días en el apartamento con nosotros?"

"Claro que no…hablando de eso. Creo que Susan eventualmente vendrá a visitarme…!"

"Por supuesto que me desapareceré del apto para que puedan tener privacidad. Sakato me ofreció quedarme con él o también puede ser donde mi papá!"

"Gracias!"

"De nada!"

Después de un rato Sesshoumaru no tuvo más que pedir la cuenta y encaminarse de regreso al apartamento. La idea de Kouji y Rin besándose era como una pesadilla sin final, que le estaba dando un infame dolor de cabeza.

De regreso al apartamento Rin se recostó a él diciéndole que se sentía un poco cansada. Sesshoumaru quería rodearla con su brazo pero se contuvo, no entendía que le pasaba con ella. Porque no podía estar en control de cada una de sus emociones como siempre. Estaba haciendo recuento de cómo Rin lo afectaba cuando su voz lo hizo reaccionar.

"Doctor!"

"Dime?"

"Es que Kira me dijo que tu tratas a las demás personas como si tuvieran lepra pero conmigo eres amable…y yo quería saber…!"

Sesshoumaru la detalló un segundo tenía una expresión como la de una niña que espera escuchar algo muy importante. Se alegró de tener la oportunidad de poder expresarle aunque fuera con palabras su felicidad de tenerla cerca.

Las palabras de Kira eran indudablemente fomentadas por el rechazo pero era gracioso pensar que él tratara a todos los demás seres vivientes como personas inferiores o algo parecido. Con una mueca arrogante le habló con voz pausada.

"Primero que todo no los trato como si tuvieran lepra y segundo siempre he sido una persona seria eso es todo. Respecto a ti pequeña la única respuesta que puedo ofrecerte es que tú me relajas!"

"mmm yo te relajo a ti…vaya es lo más bonito que me han dicho!"

Rin hablaba como si lo hiciera consigo misma y en su voz había una indiscutible felicidad y satisfacción que Sesshoumaru encontró muy agradable. Era la verdad, Rin lo relajaba. Le decía doctor, grandulón, le cocinaba, le daba masajes, se preocupaba por él de manera ferviente, pero lo más importante era que ella no se dejaba frenar por su seriedad.

Siguieron su trayecto en silencio y cuando llegaron al apartamento Rin tomó el teléfono para avisarle a Kouji que ya había llegado. La escuchó decirle que si podían hacer algo temprano porque tenía algo de sueño.

……………………

Rin terminó de arreglarse y salió de su cuarto, vestía un camisa muy femenina color rosado claro con un escote no muy profundo pero que exhibía un lindo dije montado en plata del mismo tono de su camisa. Usaba jeans a la cadera y zapatos altos de gamuza café que hacían juego con su chaqueta, faja y bolso.

Su maquillaje aunque suave, destacaba la forma almendrada de sus ojos, llevaba el cabello suelto adornado solo por una pequeña prensa. En silencio se sentó junto a él para ver la televisión algo distraída. Sin poder controlar sus impulsos Sesshoumaru se lanzó de cabeza al abismo de los celos.

"Rin!"

"Si dime?"

"Vas a venir temprano?"

Rin movió la cabeza huyendo su mirada, no quería que la viera sonreír y morderse el labio sintiéndose halagada. Cuando se volvió ella tenía una expresión calmada y conciliadora. Le sonrió antes de contestarle.

"Si doctor, vendré temprano…me vas a esperar como la otra noche?"

"Estaba preocupado…era muy tarde!"

"Si señor y gracias…hace tiempo que nadie se preocupa por mí como tu lo haces!"

Ofuscado porque el timbre interrumpía su momento con Rin, Sesshoumaru masculló un `de nada' y se levantó, no quería ver a Kouji a la cara. Al oír el timbre Rin se puso de pie como un resorte y antes de que él entrara a su habitación se despidió con un beso.

Sesshoumaru la escuchó saludar a Kouji con la voz transformada por la felicidad. Resignado, abrió su closet para escoger la ropa que se pondría para el almuerzo con el Doctor Ikegami y su esposa. Una vez que estuvo satisfecho con su elección se tiró a la cama a esperar que su gatita volviera, contando cada minuto que aquel hombre despreciable la mantenía alejada de él.

……………………… …

Tal y como Rin lo supuso Kouji fue la mejor cita que había tenido en meses, atento a todo lo que ella quería, amable, cariñoso y tan deseoso de compañía como ella. La llevó a comer algo ligero y luego a un paseo por el parque donde aprovechó para besarla sin el riesgo de que Sesshoumaru los interrumpiera.

"Ven Rin sentémonos aquí!"

"Ok"

Kouji la tomaba de la mano con suavidad mientras la atraía hacía él con una sonrisa. Rin estaba fascinada, aquel apuesto hombre era prácticamente perfecto para ella y algo de eso le dio ansiedad porque las cosas demasiado buenas y perfectas generalmente tenían algo malo, y ella no quería averiguarlo. Quería disfrutar con él, porque la hacía sentir querida y feliz.

"Cómo la has pasado preciosa?"

"Muy bien!"

Kouji le acarició el rostro con una mano, le encantaba Rin. No solo por su belleza sino por su agradable forma de ser. Incitado por la sonrisa de su hermosa compañera, Kouji se inclinó para besarla. Fue un beso tierno y electrizante.

Rin no supo porque en su mente recordó las palabras de su madre, al describir la primera vez que su papá la había besado. Su madre le había dicho que había sentido una sacudida en todo el cuerpo y su alma se había agitado en su pecho, pero Rin no sentía eso ahora. Estaba feliz y con cosquillas en el estómago pero aquella sensación distaba mucho de agitar su alma.

Continuaron besándose por un par de minutos cuando Rin abrió los ojos Kouji tenía una sonrisa y los ojos cerrados cuando finalmente los abrió lo hizo con suavidad. Ese gesto la conmovió, era obvio que aquel hombre alto y de cabello negro era una ternura. Inmediatamente después que abrió los ojos, Kouji la rodeó con ambos brazos estrechamente.

Hablándole al oído le dijo lo mucho que había disfrutado aquella noche.

"Ha sido una noche inolvidable preciosa!"

"Jejeje en serio?!"

"Si, hasta se me olvidó la interrupción de tu desagradable roommate!"

"No le digas así, él no es desagradable. Además no nos interrumpió a propósito!"

"Como tu digas preciosa…pero si es desagradable!"

"Jejeje eso es porque no lo conoces!"

Kouji no dijo nada más porque era obvio que para Rin, el desagradable de Sesshoumaru era alguien importante. Si quería estar bien con ella lo mejor sería no tratar de hablar mal de su rival. Después de todo ya tenía a Rin y nada más importaba.

Kouji la dejó al inicio de las escaleras, no quería tener que soportar otra escena de celos de Sesshoumaru. Besó a Rin con ternura y se despidieron.

"Hasta mañana Kouji!"

"Te llamo mañana…rayos! Lo había olvidado le prometí a mi madre y hermana llevarlas a casa de mi abuela que queda en las afueras de la ciudad…mmm quieres ir con nosotros?"

"Eres muy amable pero yo también le prometí a mi papá y a Deborah que pasaríamos el día juntos. Mejor llámame cuando llegues si?!"

"Ok! Que descanses preciosa!"

"Chao!"

Rin subió las escaleras corriendo y se alegró al ver la luz del apartamento encendida. Al escuchar los pasos de Rin corriendo, sin pensarlo Sesshoumaru abrió la puerta de golpe con la cara desfigurada por la preocupación.

"Rin porque vienes corriendo? Que te pasó?"

Ella no le contestó se lanzó a abrazarlo con una gran sonrisa. Sesshoumaru la sujetó por la cintura comprendiendo que aquella alegría solo significaba que la cita con el imbécil de Kouji había sido todo un éxito.

Sesshoumaru sintió como si una marea de celos y rabia lo revolcara en sus profundidades pero respiró profundo para que sus emociones no fueran visibles.

"Doctor fue genial!!"

"Ya veo!"

(Maldición…ni siquiera tengo que preguntarle si la besó…arrggghhh!)

Rin le dio un beso en la mejilla y lo estrechó fuerte antes de soltarlo y entrar al apartamento. Sesshoumaru no estaba emocionado con la idea de Kouji y Rin juntos, pero aquellas demostraciones de felicidad que significaban tenerla abrazada y con besito incluido eran bienvenidas.

Decidido a reafirmar que él también era importante le habló como el más inocente de los roommates.

"Me alegro y…dime tu novio no se enojó que mañana lo vayas a dejar solo?"

"Otra vez con eso! No somos novios y Kouji tiene cosas que hacer. Además mañana será un almuerzo especial para tí grandulón…ahora me voy a dormir. Nos vamos temprano para disfrutar del sol antes de almorzar, está bien?"

"Si pequeña!"

Sesshoumaru se acostó tranquilo y con una sensación de ser especial que se llevaba sus celos al olvido.

……………………… ………

Almuerzo…

Rin se había levantado muy temprano y estaba preparando un desayuno ligero. Llevaba un vestido agradablemente corto, sin mangas y con unos tirantes muy delgados que difícilmente cubrían el tatuaje en su espalda. Al verlo de pie todavía sin bañar Rin le dio los buenos días y le dijo que se apurara con una gran sonrisa y era obvio lo feliz que estaba.

"Doctor apúrate quiero que nademos un rato antes de almorzar!"

"Nadar?"

"Si en la piscina de la casa…apúrate!!!"

"Ok, ok estaré listo en veinte minutos!"

"Mas te vale porque tu hermano y Kagome estarán aquí en cualquier momento!"

Sesshoumaru giró sobre sus talones y se metió al baño contagiado por la felicidad de su pequeña. Mientras se bañaba trataba de hacerse una imagen de cómo sería el padre de Rin y su madrastra. Folken Ikegami era un profesor excelente y muy accesible, Sesshoumaru sospechaba que gran parte del carácter liviano y jovial de la gatita, era herencia paterna.

Le daba mucha curiosidad que Rin hubiera mencionado que Deborah estaba empeñada en conocerlo, le emocionaba pensar en que era exactamente lo que su gatita decía de él con su familia.

Cuando estaba terminando de vestirse, escuchó el timbre y se apuró a abotonar su camisa y salir de su cuarto, para ver a su hermano y a Kagome. Aparentó indiferencia cuando escuchó a las amigas comentar sobre la noche que Rin había tenido. Las palabras delicioso, beso y tierno eran como alfileres que se le clavaban en los ojos. Al escuchar las risas Inuyasha se concentró en ellas

"Que es tan gracioso?"

"Nada, lo que pasa es que Rin tuvo una cita anoche!"

"Y?"

Rin se rió como para sí misma y le hizo un ademán a Kagome para que no dijera nada más.

"Shh! A Inu no le interesa nada que no seas tú, no lo aburras con mis cosas!"

Inuyasha frunció el ceño al escuchar a Rin, su novia era su prioridad, eso era verdad; pero una de las cosas que hacía feliz a Kagome era la amistad con Rin.

"Pero Rin tu también eres mi amiga!...me haces parecer como un bestia!"

"Jeje gomen! No eres un bestia...sabes que? Me siento muy halagada de tener gente que se preocupe por mí!"

Kagome parpadeó sorprendida pero no pronunció palabra al ver la mirada que Rin y Sesshoumaru intercambiaban, dando rienda suelta a sus ideas de que ellos harían un linda pareja.

Rin recogió los platos, los lavó rápidamente y todos salieron rumbo a lo que sería un domingo inolvidable. Sesshoumaru se sentía nervioso de conocer al honorable y brillante doctor Ikegami.

Mientras iban en el automóvil Rin miró a Sesshoumaru de medio lado, su atuendo era impecable y eso la puso feliz, porque era claro que quería dar una buena impresión a su familia.

(Mi papi y Deborah se van a dar cuenta que yo tengo razón el doctor es único y especial...)

………………………

Cuando abrieron la puerta Sesshoumaru vio a su profesor recibirlos con una gran sonrisa; junto a é una mujer muy bonita posó la mirada en él. Rin se apresuró con las presentaciones, Deborah le sonreía mientras lo escudriñaba con sus ojos castaños, era como si tratara de descifrarlo.

Una vez dentro de la casa, Sesshoumaru pudo admirar la belleza del lugar. La casa era amplia y estaba decorada con un gusto impecable estaba absorto viendo varias pinturas cuando Rin lo jaló de la mano.

"Ven después te hago el tour ahora a la piscina!"

"Mejor no, es que no tengo ganas!"

"Ah? Porque no?"

"Rin!!"

"Que, no entiendo?"

Koro estaba muy cerca de ahí y llamó a Rin, cuando ella se acercó el mayordomo le dijo algo que él no alcanzó a escuchar debido a la distancia y el suave tono. Sin embargo aquellas palabras lograron apaciguar los deseos de Rin de arrastrarlo a la piscina.

"Doctor quieres que veamos la casa ahora?"

Sesshoumaru miró a Koro que se alejaba en silencio y un poco extrañado de que la gatita no insistiera, le dijo que si al la idea de conocer la casa. Fue un tour lleno de anécdotas de su infancia y recuerdos felices, aunque Sesshoumaru suponía que los tristes eran omitidos a propósito.

Una vez que habían recorrido la casa, Rin le preguntó si quería sentarse al borde de la piscina mientras ella y Kagome nadaban un rato. Al llegar a la piscina no había nadie más que Inuyasha y Kagome y eso logró relajarlo.

"Si tienes sed allá hay refrescos, iré a cambiarme!"

"..."

Dos minutos más tarde Rin salió en traje de baño y se lanzó a la piscina para reunirse con Kagome e Inuyasha. Ni una sola vez ella se volvió a saludarlo o decirle que entrara al agua, por lo que pudo tomarse el refresco sin sentirse presionado y como siempre admirando a Rin en silencio.

Después de un rato, Rin finalmente salió de la piscina y directo a cambiarse. Una vez vestida se detuvo junto a él y le habló con una voz suave y pausada mostrando una faceta apacible de su personalidad.

"Tienes hambre?"

"Algo…!"

"Vamos a la terraza almorzaremos ahí!"

"…"

Sesshoumaru se levantó y la siguió en silencio algo confundido por la ausencia de aquella fibra de entusiasmo en Rin. En la mesa hermosamente decorada los esperaban Folken, Deborah y Koro. Con un ademán Rin le pidió que se sentara junto a su padre y de reojo vio como ella se acomodaba junto a él. Aunque su atención era para Kagome.

Por un instante tuvo la intención de preguntarle que le sucedía pero se contuvo. Se sentó en silencio y sin darse cuenta se enfrascó en una conversación con Deborah y Folken mientras Rin hablaba con su cuñada y hermano. A medida que transcurrió el tiempo Sesshoumaru se iba sintiendo más en confianza desechando sus nervios.

Conversó con Folken y Deborah como si fueran conocidos de toda la vida, era muy fácil porque ambos eran personas amables, con las que se podía conversar de cualquier tema. A su lado Rin pretendía no escuchar pero la verdad era que estaba feliz que Sesshoumaru y su familia parecieran llevarse tan bien.

Koro le había dicho que probablemente para Sesshoumaru conocer a su padre era motivo de nerviosismo y era mejor que no lo presionara pero que tampoco lo dejara solo. Confiando en los consejos de su querido Koro, Rin se mantenía cerca pero algo distante y al ver la forma como Sesshoumaru y su padre conversaban sobre medicina como dos niños emocionados, supo que había sido lo mejor.

………………………

Rin estaba en la sala de televisión viendo una película con Inuyasha y Kagome. Su padre y Sesshoumaru estaban en el estudio de al lado, su papá le mostraba todos sus libros de medicina feliz de tener alguien con quien hablar que compartiera su pasión por la medicina.

De pie detrás de ella Deborah traía una bandeja con galletas y té, poniendo la bandeja en la mesa se sentó junto a Rin.

"Hola Deborah!"

"Hola Rin…quieres té?"

"Gracias…!"

Antes de que Rin pudiera preguntarle Deborah le dijo que Sesshoumaru era tal y como ella lo había descrito, alguien único.

"Yo creo que el más feliz es tu padre, ya tiene alguien con quien conversar sobre operaciones y venas y todas esas cosas!"

"Si verdad, si siguen hablando tendré que irme sola al apartamento!"

Rin probaba el té algo nerviosa, tenía un sentimiento tan extraño al estar conversando con Deborah tan amigablemente que sin razón aparente sintió como las lágrimas se amontonaban en sus ojos.

Al notar la incomodidad de Rin, la mujer pensó que la estaba presionando y se movió para levantarse.

"Matte…Deborah…tengo algo que decirte!"

Deborah se sentó de nuevo junto a ella con delicadeza y sin atreverse a mirarla porque había algo en la voz de Rin que sonaba apagado y triste.

"Dime…!"

"Umm bueno yo…discúlpame por tratarte mal…es que aún la extraño… pero me gustaría contar contigo!"

A Rin se la extinguió la voz y al cerrar los ojos las lágrimas fueron una realidad pero como pudo se contuvo, cerrando las manos alrededor de la taza.

Deborah literalmente se quedó muda por un par de minutos para luego hablarle con una voz suave y llena de felicidad.

"Será un placer y un honor Rin!"

"…gracias!"

Deborah la vio llevarse la mano al rostro para limpiarse las lágrimas. Inuyasha y Kagome estaban en silencio y no se atrevían a moverse esperando que su amiga se calmara. Rin cerró los ojos por lo que pareció una eternidad, evocando a su difunta madre con una sonrisa. Cuando finalmente abrió los ojos estaba más tranquila y se acomodó en el sillón para seguir viendo la película.

Su madrastra recogió las tazas y se despidió de ella con una sonrisa. Casi sin darse cuenta Rin se quedó dormida frente al televisor esperando por Sesshoumaru. Inuyasha y Kagome no se atrevieron a despertarla para despedirse. Se despidieron de Deborah y Koro que les aseguró que él la llevaría una vez que Sesshoumaru y Folken terminaran.

………………………

Sesshoumaru escuchaba extasiado las anécdotas del Doctor Ikegami y se dio cuenta que igual que Rin cuando se emocionaba, podía hablar sin parar. Al ver la cara de su interlocutor Folken se rascó la cabeza y soltó una risita.

"Muchacho no estás mareado?...Cuando me emociono puedo ser un interminable torbellino de palabras!"

"No al contrario es un honor Sensei!"

"Ja ja ja gracias pero me puedes llamar Folken!"

"…"

La expresión vacía de Sesshoumaru hablaba por si sola, sería muy difícil para él tratar a su maestro con tanta familiaridad y el doctor se rió moviendo la cabeza, despertando la curiosidad del estudiante.

"Disculpa que me ría es que ella parece conocerte muy bien!"

"Como dice?"

"Ella dijo que pondrías cara de susto si te pedía que me llamaras por mi nombre…en realidad dijo `cara de grandulón desubicado'!"

Sesshoumaru no tuvo más opción que sonreír y admitir que era cierto.

(Grandulón desubicado?? Ya va a ver esa gatita…!)

Ambos hombres continuaron conversando un rato más hasta que Deborah entró al estudio.

"Disculpen que los interrumpa pero Rin lleva 2 horas dormida en el sillón!"

Folken soltó una risita y miró a Sesshoumaru como si lo hubieran pillado haciendo una travesura. Le entregó un libro de la biblioteca y tomó a su esposa de la mano saliendo en dirección a la sala de televisión. Al llegar Koro estaba sentado junto a ella con la televisión encendida pero sin volumen.

"Koro-sama!"

El mayordomo se levantó e ignoró a su jefe, clavando la mirada en Sesshoumaru que veía a Rin de medio lado.

"Por fin…la niña tiene dos horas de estarlo esperando jovencito!"

Sesshoumaru no supo que decir, el robusto hombre lo miraba con los ojos entrecerrados y era obvio que tratándose de Rin era capaz de cualquier desastre. Que lo llamara jovencito era muestra clara de su autoridad, por lo que no se atrevió a contradecirlo, tomó el bolso de Rin guardó el libro y se acercó a ella.

"Gomen Koro-sama no volverá a pasar!"

"Si claro!...Jovencito se lo perdono porque el cardiólogo amigable no tiene con quien conversar. El auto está en la entrada, no la desabrigue!"

"Hai!"

Deborah y Folken miraban el intercambio en silencio y conteniendo la risa, Sesshoumaru ciertamente tenía cara de desubicado al recibir el sermón de Koro, que le dio un beso en la frente a Rin y se retiró en silencio.

Folken se aproximó hasta su hija pero se detuvo al ver la facilidad con que Sesshoumaru la tomaba en brazos, Deborah sonrió al contemplar la forma como Rin se aferraba a su roommate y sus ideas de ellos dos como pareja se vislumbraban tal y como Kagome se lo había descrito, un flujo de energía imposible de ignorar.

Con Rin en brazos Sesshoumaru caminó hasta la salida y montó al automóvil en la parte de atrás. Deborah cerró la puerta y en el momento que estuvo sentada junto a su marido Folken arrancó.

Sesshoumaru sentó a Rin dejando que se apoyara en su hombro, con el movimiento del carro ella entreabrió los ojos y habló aún dormida.

"Doctor eres tú?"

"Si pequeña ya pronto estaremos en el apartamento!"

"Awww que bueno…mmm me dejaste sola!"

"Si lo sé, gomen!"

Ni Deborah ni Folken pronunciaron palabra, o se dieron por enterados de la conversación detrás de ellos. Una vez que llegaron al apartamento Sesshoumaru acomodó el sweater de Rin y trató de despertarla para que caminara, al ver que ella se acurrucaba aún más la volvió a cargar en brazos.

Deborah le abrió la puerta y deshizo la cama para que Sesshoumaru la acostara. Una vez que puso la cabeza sobre la almohada Rin murmuró un `gracias grandulón'. Su padre se despidió de ella con un beso, se despidieron de Sesshoumaru con la promesa de que fuera más seguido a visitarlos ya que ahora era como de la familia.

Una vez que estuvo solo Sesshoumaru se dejó caer en el sillón con el libro que le había prestado su Sensei en las manos, reflexionando sobre aquel día. La familia de Rin era muy cálida y amigable y él no pudo evitar pero compararlos con la familia de Susan. También eran muy unidos y amables pero él no se sentía igual que con los Ikegami.

Cerró los ojos un instante se puso de pie y fue hasta la cocina, al pasar junto al teléfono vio la luz de los mensajes parpadeando. Supuso que era Kouji y alargó los dedos fastidiado, el mensaje era para él.

"Hola Sesshoumaru querido, te llamé varias veces pero supongo que estabas en la biblioteca o algo parecido. Tendré vacaciones en tres semanas y quiero ir a visitarte. Llámame, te quiero. Bye!"

Sesshoumaru escuchó el mensaje dos veces más para estar seguro. Susan vendría a visitarlo en tres semanas y en lugar de estar feliz un frío desagradable le subió por la espalda. Estaba tan acostumbrado a su convivencia con Rin que en una parte de su mente aquella visita de su prometida parecía una molesta e innecesaria intromisión.

(Visitarme?? Para que??...que estoy diciendo? ella es la persona que yo escogí para ser mi esposa, no puedo defraudarla…y cuanto tiempo pensará quedarse?...)

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Muchas gracias por sus reviews y paciencia, he estado super ocupada con otras cosas. Mucha gente me pregunta sobre el Príncipe y para serles sincera el siguiente cap está por la mitad, pero pronto se los prometo.