InuYasha Fan Fiction ❯ Epílogo de un Amor ❯ "Los Pensamientos de Él" ( Chapter 2 )

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Disclaimer: Inuyasha y compañía son propiedad de Rumiko Takahashi.
 
Capitulo 2. “Los Pensamientos de Él”
 
Mientras tanto en el otro lado del bosque Inuyasha se encontraba recostado en la rama de un árbol mirando las estrellas. Se le veía un tanto fastidiado, al parecer la idea de que Kagome se encontrara en su época (en el futuro) lo mortificaba. No por el hecho de que la extrañara, la verdadera razón según él, era que esta situación los retrasaba en la búsqueda de los fragmentos restantes de la perla de Shikon.
 
“Feh..... esa tonta de Kagome, ¿que demonios estará haciendo?.”
 
Le molestaba mucho que Kagome regresará a su época, pero ¿Cuál era la verdadera razón? ¿Acaso existía algún motivo oculto o desconocido para él? ¿Por qué intentaba negar la verdadera razón por la cual odiaba tanto que ella se marchara? El verdadero miedo de Inuyasha, el mas grande temor, es que ella nunca regrese.
 
“Kagome..... ¿Me pregunto que estarás haciendo en tu época? ..... ¿Por qué estoy pensando en ti? ... ¿Por qué me siento así cuando tu no estas aquí conmigo?”
 
Inuyasha sentía un vació en su ser, como si algo le faltara. Él la extrañaba, aunque no quisiera admitirlo. Tenerla cerca calmaba esos sentimientos de ansiedad que se apoderaban de él a cada instante. Era algo extraño, ella lo hacia sentir seguro y querido. Gracias a ella él ya no estaba solo, ahora tiene amigos que se preocupan por él y viceversa. Pero Kagome también había despertado sentimientos en él que no quería comprender o que se negaba a creer. Tratando de ocultarlos en lo mas profundo de su ser para evitar que estos siguieran su curso, pero con el transcurso del tiempo se había hecho mas difícil negarlos.
 
“¿Acaso ella es necesaria en mi vida? ... ¿Por qué me siento confundido? ... Pero que cosas estoy diciendo .... Feh... esa niña lo único que hace es confundirme y hablar disparates”
 
En cierta forma él tenía toda la razón. Kagome confundía a Inuyasha, él que siempre se había mostrado indiferente y desconfiado hacia los humanos, ahora los protegía. ¿Pero como era posible? Esa niña, como él secretamente solía llamarla tratando de restarle importancia había logrado lo imposible. En ella confiaba ciegamente, cuando él se había prometido así mismo no volver a creer en nadie más. Ella había curado las heridas de una traición que no fue mas que un vil engaño que trajo como consecuencia el odio entre dos personas que se amaban....
 
“Kagome”
 
Aquella jovencita había logrado meterse en lo mas profundo de su corazón. Sin darse cuenta, Kagome había traspasado todas las barreras que el había forjado con el objetivo de protegerse así mismo. Despertando preguntas que aun se negaba a contestar.
 
“Kikyou .... ¿realmente la amé?..... ¿aun la amo?.... ¿Qué es lo que verdaderamente siento por ella?”
 
De la nada unas palabras hicieron eco en las tinieblas, revelando a una figura que había permanecido secretamente oculta observando al hanyou meditar. Tratando con éxito de escuchar sus mas profundos secretos.
 
“......Ya veo .... Inuyasha .... Estas dudando.”
 
Estas palabras sacaron de su concentración a un atónito Inuyasha que sin darse cuenta había estado pensando en voz alta y no notó la presencia de Kikyou, ¿pero desde cuando estaba ahí?, ¿cuánto había escuchado? Y lo mas importante ¿qué demonios estaba haciendo ahí? No era común que la sacerdotisa lo buscara, siempre era él, él que seguía su rastro con intenciones de poder verla o hablar con ella.
 
“.....Kikyou” - dijo dudando antes de preguntar lo que lo estaba perturbando - “.....¿qué haces aquí?”
 
Aquella pregunta tomo por sorpresa a la sacerdotisa quien con aire de indiferencia se limitó a contestar con desprecio y con una sonrisa irónica en los labios.
 
“Pero que bienvenida ... Inuyasha ... ¿Acaso no te da gusto verme?“
 
Kikyou miraba fríamente a Inuyasha que aun seguía en la rama del árbol, pero él claramente pudo divisar esa sonrisa dibujada en sus labios. Kikyou era tan distinta a Kagome, la sonrisa de Kagome es tan cálida, llena de sentimiento, mientras que la sonrisa de Kikyou no es mas que una sonrisa irónica. Pero ahora había algo distinto en su mirada, en su sonrisa, algo maligno que produjo un leve escalofrió en Inuyasha. Lo cual indicaba que Kikyou no había venido en buenos términos, ni mucho menos con buenas intenciones. Algo realmente preocupante considerando lo poderosa y aterradora que ella podía ser. El único alivio que sentía en ese momento era que Kagome se encontraba a salvo en su tiempo, lejos del alcance del odio de la sacerdotisa.
 
“Dime Inuyasha .... ¿Acaso no piensas bajar? o prefieres que sigamos hablando así”
 
Aquello no había sonado como una pregunta, ni mucho menos como una petición. Era claramente una orden, y la amenaza se podía leer en sus ojos.
 
Inuyasha bajó del árbol, pensando que lo mejor era no provocar su ira, era evidente que había venido con intenciones no muy buenas. Poniéndose frente a ella
 
“Kikyou ... tanto tiempo sin verte.”
 
Kikyou no pudo evitar reír con sarcasmo e incredulidad. El rostro de desconcierto de Inuyasha solo hizo que la risa se prolongara más.
 
“Que pasa ... Inuyasha ... ¿por qué tanta formalidad? ... ¿Acaso no recuerdas la última vez que nos vimos?”
 
Inuyasha no contesto. Ya había pasado tanto tiempo desde la ultima vez que la vio. ¿Qué había cambiado desde esa vez?.... ¿Por qué de pronto sentía ganas de no estar ahí en su presencia?
 
Ante este silencio incomodo Kikyou prosiguió viendo las dudas que claramente se podían leer en el rostro de Inuyasha. ¿Por qué le era tan difícil ver la verdad que ella había descubierto hace tanto tiempo atrás?.... ¿Por qué negaba esa verdad?..... La única palabra que se le venia a la mente era Lastima...... y eso era lo ultimo que quería que sintieran por ella.
 
“No recuerdas cuando me abrazaste diciéndome que no habías dejado de pensar en mí ni un instante.”
 
Inuyasha trató de recordar aquella noche y aunque parecía que hubiera sido ayer no podía comprender el por qué se sentía confundido si ya se había decidido por Kikyou hace mucho tiempo ... Entonces .... por qué ahora ... él...dudaba
 
“¿Qué ha cambiado desde entonces Inuyasha?”
 
¿Qué ha cambiado desde entonces?..... una simple pregunta tan fácil de responder y a la vez complicada de entender. Complicada para él que no tenia claro que era lo que estaba pasando con sus sentimientos.
 
Kagome......
 
¿Por qué su nombre me viene a la mente como si fuera la respuesta a todo?
 
No sabiendo que responder, y sintiendo remordimientos por las dudas que estaba sintiendo, Inuyasha simplemente trato de disculparse sin éxito. “Kikyou yo .....” las palabras no salían de sus labios y la culpa de haberla traicionado no lo dejaban confesar su verdad. Una verdad que sabia y quería negar por cumplir su deber y hacer lo correcto.
 
Sin embargo Kikyou podía leer entre líneas y sabia lo que su silencio significaba.
 
“El lazo que nos unía se ha roto ...... Pero aun así .... tú me perteneces Inuyasha...... No lo olvides”
 
Esto ultimo le sonó a Inuyasha como una sentencia de muerte, él le pertenecía a Kikyou, ella había muerto por él y ahora él tenía que pagarle con su vida.
 
Inuyasha sabía que esto ocurriría tarde o temprano, y podía sentir como se le desgarra el alma ... y lo único que podía pensar en ese momento era en Kagome, su dulce Kagome ... ¿qué va a ser de ella... cuando él ya no este para protegerla?
 
A Inuyasha le atormentaba la idea de no volver a ver a Kagome, pero ¿por qué?. De pronto vio como Kikyou le dio la espalda y empezó a marcharse, dejando a Inuyasha confundido y con una melancolía que se apoderaba de él con cada latido de su corazón.
 
Kikyou se retiraba lentamente con sus propios pensamientos y planes al respecto
 
“Inuyasha... lo que sentí por ti tal vez fue amor ... o tal vez solo una ilusión .... Puedo ver en tus ojos preocupación y tu mente solo grita su nombre ... Ahora que lo pienso, lo nuestro nunca debió ser, uno no puede huir de su destino y él mío siempre fue ser una sacerdotisa. Se que mereces ser feliz, pero para eso debes darte cuenta de tus sentimientos .... Aun no puedo descansar en paz ... hay algo que todavía tengo que hacer”
 
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Habían transcurrido ya muchas horas pero Kagome aun seguía en el mismo lugar, sentada en el pozo mirando a las estrellas, su mente se hallaba en blanco, no quería pensar, sabía que Inuyasha se encontraba en estos momentos con Kikyou. Pensar en ello le hacia daño. De pronto una fría voz se escucho y un escalofrió recorrió todo su cuerpo
 
“Así que aquí estabas ... Kagome.”
 
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¿quién será, quien será? Bah, Quienes leyeron anteriormente mi fic lo saben jejeje =)
Hasta la próxima, bye.