Slam Dunk Fan Fiction ❯ Yin y Yang ❯ Deseo o Maldición ( Chapter 2 )
[ T - Teen: Not suitable for readers under 13 ]
Yin and Yang
By: Late-Sleeper
Traducido por: Hikaru Itsuko
Disclaimer:Los personajes no me pertenecen, son propiedad de Takehiko Inoue sama, es un fic sin fines de lucro.
Capítulo 2: Deseo o Maldición
Dos criaturas salieron del yin yang y para horror de Hanamichi estas tomaron la forma de dos niñas.
Una de las chicas vestía uniforme, la falda era color azul-verdoso del mismo color del humo que la formo y un lazo que le hacía juego con una camisa blanco-bebe. En su frente tenía atada una cinta blanca con la palabra “yang”.
La otra solo tenía puesto un pijama que consistía en una camisa sin mangas y un short de corte a las rodillas, estaba abrazando una almohada color rosa. En su frente también tenía atada una cinta con la palabra “yin”. Lo que sorprendió a Hanamichi es que las dos chicas eran idénticas, ambas lucían cabello corto con un estilo peinado-al-aire, misma cara, la misma estructura del cuerpo… bueno prácticamente iguales, lo único que las diferenciaba era la ropa y la banda en la frente con su nombre en ellas.
“¡Oh mira Yin! Un lindo pelirrojo.” Yang dijo entusiasmada señalando a un desorientado Hanamichi.
“…” Yin solo miró a su emocionada compañera sin ninguna expresión en la cara, sus ojos se contrajeron en una línea y Yang mostró una gota de sudor con la reacción de Yin.
Hanamichi miró a las dos, una primero y después la otra... sus ojos se abrieron en entendimiento cuando una de ellas llamo Yin a la que tenía el pijama, ‘así que la otra debe ser Yang’ se felicito mentalmente por haber descifrado el nombre de la que vestía el uniforme.
“¡En serio! Como si el nombre en nuestra frente no nos delatara” Yin le dice sarcásticamente al pelirrojo.
Hanamichi abrió los ojos un poco más por la impresión al escuchar la crítica de Yin. “¿Puedes leer mentes? ¿Qué son ustedes?” Caminando hacia las dos chicas.
Cuando tenía unos centímetros de separación de las chicas, se agacho para verlas de cerca. Con una mirada intimidante hacia ambas las observo, pero Yang solo le sonrió y Yin… bueno ella lo miró sin ninguna expresión.
Hanamichi se enderezo con una sonrisa triunfante en su rostro. De repente radiantes rayos de sol aparecieron sobre su cabeza “¡ah ha! ¡Son las enanas de cenicienta, nyajajajaja! Soy un genio” el pelirrojo se río escandalosamente mientras hacía su pose y los rayos resplandecían mas.
A las dos chicas le aparecieron gotas de sudor mientras el lunático chico se reía con ganas durantes unos minutos, y las gotas se hicieron más grandes cuando Hanamichi se ahogo al entrarle una mosca en su gran boca.
“Este… no somos enanas…” Yang se rasco la parte de atrás del cuello, pero antes de que continuara Yin se metió.
“Y Cenicienta no tiene enanos es Blanca Nieves, baka.”
“Nyajaja el genio solo las estaba probando...” Hanamichi se rió forzadamente tratando de ocultar su vergüenza, mientras las dos chicas le miraban con una expresión de-si-claro.
“Entonces ¿cual es tu deseo?” Las dos le preguntaron al mismo tiempo.
Esto lo hizo reaccionar y las miró seriamente por unos cuantos segundos “Quiero que otros me quieran.”
El arranque repentino del pelirrojo fue tan serio que ahora era el turno de ellas de abrir sus ojos al máximo con rastros de confusión. Ambas vieron al chico buscando alguna pista que les dijera que era una broma, pero los ojos de Hanamichi estaban tan llenos de sinceridad que les trajo una sonrisa a sus rostros. Al fin habían encontrado alguien con un corazón de oro… alguien que no deseaba ni dinero ni fama… solo quería que lo amaran.
Yang miró más de cerca al chico alto, camino alrededor de él buscando algún defecto, cuando se detuvo frente a él y se puso de puntillas para ver con detalles la cara del pelirrojo.
El rostro del pelirrojo era sorpresivamente hermosa cuando se miraba de cerca, sus labios eran irresistiblemente-besables y Yang casi quería besar esos labios cuando el fastidiado chico hizo un puchero. Su nariz no era ni muy larga, ni muy corta, era perfecta para su cara la cual le daba un look masculinamente atractivo.
Pero lo que capto la atención de Yang fueron sus grandes ojos-marrones-de-cachorrito, sus pupilas expresaban la mirada más inocente que ella haya visto, representaba la inocencia de un niño.
‘Pero si es hermoso de adentro hacia afuera ¿cómo es que no le gusta a nadie?’ Yang miró a Hanamichi pensativamente mientras escudriñaba al chico una última vez y sus ojos se posaron en los brillantes cabellos rojos.
“¡Ah ja! Cambiemos el color de tu cabello.” Yang gritó encantada.
“¡¿NANI?! Hey no te atrevas a tocar mi cabello... es el único recuerdo que me queda de mi madre.”
“…”
A Yang y Yin les apareció gota de sudor pero cumplieron la petición del pelirrojo.
“¡Ya se! Tal vez es tu estatura. Las personas se pueden sentir intimidadas por eso.”
“¡Baka! ¿Cómo podría jugar basketball si me haces más pequeño como Ryotchin.”
“¿Tú cara?”
“¿Estás diciendo que el genio no es guapo?”
“¿…Tal vez tu voz?”
“Queeeeeee… la vez del genio es perfecta...” Hanamichi comenzó a cantar su famosa canción ‘yo soy el genio’ desafinando, fastidiando de está manera a las dos.
“Yo creo que es tu actitud.”
“¿Estás diciendo que soy malo?”
Yin solo observaba todo el lío entre Yang y el idiota, pero lindo pelirrojo. Mientras la conversación sin importancia progresaba Yin sintió como su paciencia se iba acabando poco a poco, la cual sería la gota que derramara el vaso.
Yin estaba a punto de decir algo para finalizar la discusión cuando Yang de repente grito enojada.
“¡AHHHHHHH! ¿Entonces que es lo que realmente quieres?”
Yin se sorprendió y una gota de sudor se formo es su cabeza, cuando miró con miedo a Yang. Esta era la primera vez en un millón de años que escuchaba a Yang gritar por estar enojada. Tomo nota mental: nunca acabar la paciencia de Yang.
Yang ardía de furia, tomando la forma de súper saiyajin 3, mientras miraba ferozmente al ahora inquieto genio, Yin también en el fondo estaba inquieta.
Hanamichi miró con preocupación a Yang, sus ojos se mostraban confusos e indefensos. Yang aun estaba viendo furiosamente al pelirrojo cuando su mirada llegó a los ojos de Hanamichi. Con esa expresión de tristeza en los ojos-de-cachorro el chico logro derretir el corazón de Yang.
“Ok. Pensare en otra idea, pero esta será la última vez, ¿entendido? No aceptare más negativas.” Yang miró a Hanamichi con una expresión mucho más suave.
“Ahora déjame ver” Yang miró a Hana buscando, una mano en su cintura mientras la otra reposaba en su barbilla, observando a Hanamichi de vez en cuando.
Ahora era el turno de Hanamichi de perder la paciencia pero tenía miedo de que la súper saiyajin Yang apareciera otra vez, así que solo hizo un puchero molesto. Yang fue afortunada para ver el más lindo puchero que haya visto ‘kawaii’.
Cuando vio esto, una idea le vino a la mente...
“¡Ya se!” Yang golpeó el aire triunfadoramente y miró a Hanamichi con un destello en sus ojos.
Hanamichi la miró con un poco de miedo y diversión.
Yang de repente sacó de la nada una varita mágica con un sol en un extremo, le pico el ojo a Hanamichi y empezó un baile raro alrededor de él.
Hanamichi se sintió un poco nervioso mientras Yang bailaba a su alrededor, imágenes de la extraña vieja de hace un rato vuelven a su mente, el solo pensar en esa mujer hizo que el rostro de Hanamichi perdiera el color por el terror. Y Yang tarareaba de una manera espeluznante y acompañado del horripilante baile empeoro la ansiedad que sentía Hanamichi.
Humo comenzó a formarse alrededor de Hanamichi a medida que Yang cesó poco a poco el ritual que daba-escalofrío-en-la-columna. El humo se empezó a acumular más y finalmente engulló a Hanamichi por completo.
El pelirrojo quería gritar con todas sus fuerzas, pero la voz no le salía de la boca, y para empeorar las cosas su cuerpo estaba paralizado por segunda vez.
Cuando se disipó el humo el rostro de Yang mostró una sonrisa satisfecha. Yang miró a su compañera a la cual cacho mirando boquiabierta a Hanamichi.
Al ver a una Yin estupidizada y una Yang sonriente hizo que Hanamichi se sintiera intranquilo –un sentimiento en el cual debería confiar de ahora en adelante.
“Presentando a la Señorita Sakuragi Hanamichi” Yang movió ambas manos hacia Hanamichi a medida que presentaba la nueva Hanamichi a una Yin todavía desconcertada.
“¡¿SEÑORITA?!" Hanamichi miró a las dos con perplejidad.
El instinto le estaba diciendo que algo no estaba bien –¡un momento! Así que con el chasquido de un dedo sus manos vagaron por todo su cuerpo y a así sus manos tocaron un bulto en su pecho...
‘…Esperen ¿un bulto?’ Se toco un poco dudoso las dos protuberancias que tenía en su pecho y en cuanto el mensaje a su cerebro...
“¡AAAAAAAAAAHHHHHHHHHHHHH!”
“¡AAAAAAAAAAHHHHHH HHHHHHH!”
Un grito muy fuerte hizo eco en toda Kanagawa… y la fuente de ese chillido ensordecedor era una hermosa chica pelirroja de ojos marrones… ¿chica?.
“¡¿QUÉ HAS HECHO?!”
“Solo te hice adorable” Yang le sonrió a Hanamichi con alegría.
Yin estaba tan desconcertada con la vista que tenía frente a ella que no podía decir ni una palabra coherente, parada frente a ellas estaba una alta, ojos-marrones, chica-pelirroja –la versión femenina del idiota que hace poco discutía con Yang.
La imagen de Hanamichi-chica que Yang esperaba estaba lejos de lo que veía; él, o mejor dicho ella quitaba el aliento con tan solo mirarla. Nunca espero que la versión femenina del pelirrojo fuera una diosa en carne y hueso.
Yang sonrió para sí misma mientras estudiaba su obra de arte. Su obra maestra ahora tenía el cabello largo casi llegaba a la altura de su cintura, sus suaves ondas entre rojas-doradas tocaban un poco su rostro dándole una aura suave femenina. Las cejas eran abundantes como antes pero con un toque femenino, los ojos casi iguales excepto por las pestañas que son más largas y espesas de una tonalidad más oscura, haciendo que su mirada sea sensual. La nariz se hizo un poco más chica para que encajara en la pequeña cara con forma-corazón. Pero lo que realmente capto la atención de Yang fueron los labios de Hanamichi, eran tan rojos como cerezas y el labio superior un poco más grueso, que nadie podría resistirse a besarlos.
El cuerpo es tan maravilloso como el rostro, sus hombros son delgados pero perfectos para sostener su hermosa cabeza. Sus senos no son ni muy grandes ni muy pequeños, firmes mientras estaban levantados orgullosamente en su pecho. Su cintura era delgada como un cisne y sus caderas son simplemente perfectas. Sus piernas a pesar de estar escondidas por jeans están totalmente en forma. La piel es dorada con un toque rosado dando una impresión lisa y suave. Algo que se podría llamar como leche y miel.
Pero cuando la mirada de Yang volvió al rostro de Hanamichi un pensamiento le llego a la mente... ‘Su rostro… parece demasiado femenino para ser un chico, pero demasiado masculino para ser de una mujer...’
El rostro de Yang se disolvió en una pequeña sonrisa... ‘me recuerda a Atalanta… no ella es mucho mejor, es una diosa... debe ser Atenea... una...’
“…Una diosa en un disfraz de humano.” Yin completó la oración de Yang.
Yang lanzó una mirada furtiva sobre su hombro a Yin que aun estaba mirando boquiabierta a la pelirroja que ni siquiera se movió por un largo tiempo. Yang quería soltar la carcajada al ver a Yin tan sorprendida, era la primera vez que Yin se quedaba observando boquiabierta a alguien, pero Yang supuso que Hanamichi era diferente, divinamente diferente.
“¡Hey! ¡Hey!” Hanamichi gritó por décima vez rompiendo el hilo de pensamientos de Yang y el asombro en el que se encontraba Yin.
“¡Baka! ¿Por qué me transformaste en chica? ¡Cámbiame de vuelta... AHORA!”
“¿Eh?” Yang se rascó la cabeza mientras los ojos de Yin volvían a la normalidad.
“¿Eh? Lo siento no puedo hacer eso…. Perdón pero no se puede revertir el deseo al instante. Discúlpame” Yang contestó infantilmente mientras se mordía el labio inferior y con miedo miró a Hanamichi por encima del hombro mientras se sonaba nerviosamente los nudillos frente a la ahora diosa enfurecida.
“¡¿NANI?!” Hanamichi estaba a punto de agarrar a Yang cuando Yin finalmente hablo.
“Sí, puede revertirse.”
“¡¿Huh?!” Yang y Hanamichi gritaron al mismo tiempo.
“Hmmm….” Yang se rascó la barbilla, pensando profundamente sobre lo que Yin había dicho. “¡Ah huh!”
“…”
“…”
“¿Eh? ¿Qué es lo que era?” Yang se rasca la cabeza a manera de disculpas y varias gotas de sudor bajaban por su cabeza.
Yin y Hanamichi colapsaron en el piso con el arrebato de Yang, sus pies están moviéndose al aire. *tipo comics*
“Baka.”
“¡Ah! jejeje… lo siento… ¿estabas diciendo para revertir el hechizo verdad?”
“¡Aja eso!” Hanamichi afirmo con la cabeza alegremente como un niño casi encima de Yang.
“No hay ninguna…”
“¡¿NANI?!” Hanamichi cayó de rodillas colocando su cara entre las palmas de sus manos.
“Pero… si una persona, quien te ame como chico, desea que regreses a tu antigua forma el deseo puede romperse.”
“¡Youhei!” Los ojos de Hanamichi brillaron con la buena noticia que ella acaba de recibir.
“¡Nu ju! No un amor platónico.” Yang negó con el dedo hacia Hanamichi, el cuerpo apoyándose un poco sobre Hanamichi y la otra mano en su cadera.
“Entonces eso es.” Yang se enderezó y fue hacia Yin. “¡Chow!” Y en un instante, y lanzando un beso, las dos desaparecieron dejando a una chica pelirroja aturdida.
:Tsuzuku:
§ Líneas fuera de contexto o notas de la autora §
Jejeje pues aquí van mis notas, pues la autora aquí pedía disculpa por haberse atrasado, yo para actualizar paso casi una semana, o menos, pero bueno aquí lo tienen, no sean muy duros conmigo –hace reverencia-
Gracias a todos los que dejaron reviews, ellos vieron que les conteste ahí mismo, nos leemos en el siguiente.
Gracias Mako chan por ser beta del fic, por betear xD